El presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, en la mañana de ayer, 03 de noviembre, calificó de ladrones a pacientes y enfermeras que se encontraban al interior del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins, en Jesús María. Este grupo de personas manifestaron su rechazo hacia su gestión y le gritaron “¡corrupto!, ¡fuera, Castillo, fuera!”.
“Los que gritan afuera ¿saben por qué? porque hoy no tienen espacio para robar a este pueblo y hay que darle al país y a la clase obrera y trabajadora (…) Hoy los que gritan afuera ya no tienen la oportunidad de aquellas cúpulas inmensas donde antes tenían todo y en qué condiciones han dejado hoy día al pueblo”, expresó.
Los hechos se quedaron registrados en varios videos de personas que grabaron el rechazo hacia su gestión y la red de corrupción enquistada en el gobierno de Pedro Castillo. El mandatario llegó hasta Jesus María, junto al ministro de Trabajo , Alejandro Salas y la nueva titular de Salud, Kelly Portalatino, para la ceremonia por el 64 aniversario del hospital del seguro social.
El jefe de Estado fue abucheado en su llegada y salida por decenas de adultos y ancianos que dejaron lo que estaban realizando para mostrar su desprecio a la forma en cómo dirige el país. Además, una mujer que se encontraba cerca del lugar reclamó la falta de equipos médicos. “Me están mandando a atenderme al privado (clínica), ¿qué está haciendo el gobierno? ¿por qué no traen equipos?”, señaló.
Castillo al momento de retirarse no respondió las preguntas de la prensa. Por su parte, la Policía Nacional se encargó de cercar las salidas de los pasillos para que nadie pudiera aproximarse al presidente. Frente a esto, varios pacientes continuaron protestando. “No entiende que el pueblo no lo quiere”, resaltaron.
Por otro lado, Diana Gonzáles, presidenta de la Comisión de Descentralización, dijo para Perú 21 TV, que la población ya está cansada de la incapacidad del presidente.
“La gente está cansada de la corrupción, de la falta de trabajo, de la incapacidad del gobierno y ojalá esto también lo pueda ver la OEA, para que lo pueda sentir en las calles, para que lo pueda percibir. Esto no es otra cosa que el resultado de un presidente encerrado en Palacio”, aseveró.