Investigadores surcoreanos analizaron datos recogidos de unos 80.000 hombres estadounidenses a lo largo de dos décadas. Los que consumían más vegetales en su dieta tenían un 22% menos de probabilidades de desarrollar el cáncer, en comparación con los que comían menos. Pero no se observó tal relación en las mujeres, de las que se incluyeron en el estudio 93.475.
En general, los hombres tienen mayor riesgo de cáncer colorrectal, el tercero más frecuente en todo el mundo: uno de cada 23 hombres y una de cada 25 mujeres lo padecen a lo largo de su vida. Se calcula que cada año se diagnostica la enfermedad a unos 100.000 adultos estadounidenses. Los expertos recomiendan someterse a una revisión cada 10 años a partir de los 45 años para evitarlo.
El estudio -publicado en la revista BMC Medicine- reclutó a 79.000 hombres y 93.000 mujeres de Los Ángeles y Hawai. Por término medio, los hombres tenían unos 60 años al inicio del estudio, mientras que las mujeres tenían 59 años.
Para evaluar las dietas, se preguntó a los participantes con qué frecuencia consumían determinados alimentos y bebidas de una lista de más de 180 artículos. También se les preguntó por el tamaño de las raciones. Las personas podían marcar que consumían cada alimento desde “nunca o casi nunca” hasta “dos o más veces al día”. En cuanto a las bebidas, las respuestas oscilaban entre “nunca o casi nunca” y “cuatro o más veces al día”.

Los grupos de alimentos se clasificaron en alimentos vegetales saludables (cereales integrales, frutas, verduras, aceites vegetales, frutos secos, legumbres como lentejas y garbanzos, té y café), alimentos vegetales menos saludables (cereales refinados, zumos de fruta, patatas, azúcares añadidos) y alimentos animales (grasas animales, productos lácteos, huevos, pescado o marisco, carne). A continuación, los investigadores dividieron el consumo diario por 1.000 kcal en quintiles, del de mayor consumo al de menor.