Plan Nacional del Café apuesta por garantizar la sostenibilidad de su cultivo en Perú

Documento será presentado oficialmente el próximo 11 de octubre.

Fuente: Andina

El Plan Nacional de Acción del Café Peruano tiene, entre otros objetivos, garantizar la sostenibilidad de este cultivo bandera y su puesta en marcha constituye una oportunidad para generar más empleos, reducir la deforestación y luchar contra el cambio climático. Este importante documento será presentado oficialmente el próximo 11 de octubre.

Debido a esto, María del Carmen Sacasa, coordinadora residente del Sistema de las Naciones Unidas y representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Perú, sostuvo que hoy en día el mercado exige por parte de los consumidores un café de mayor calidad y sostenibilidad.

“Consideramos que el Plan Nacional de Acción del Café es una oportunidad para generar un marco de políticas públicas, generar más empleo, evitar la deforestación y, a su vez, contribuir con medidas de adaptación y mitigación del cambio climático. Todo esto en el marco de la agenda 2030 y los objetivos de desarrollo sostenible”, declaró Sacasa.

Según el PNUD, un café en armonía con los bosques es posible en el Perú. Este grano, que crece en el corazón de la Amazonía, es el principal cultivo de exportación del país, el sustento de más de 220,000 familias de pequeños productores y, si se cultiva de manera sostenible, un aliado en la conservación de los ecosistemas. Las familias peruanas ya están trabajando por un café más sostenible.

Para contribuir a ese futuro, el PNUD en el Perú, a través del Programa de Commodities Verdes, financiado por la Cooperación Suiza (SECO), apoya al Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) y al Consejo Nacional del Café a desarrollar una visión conjunta y un Plan Nacional de Acción del Café Peruano que mejoren la competitividad y la sostenibilidad del café.

Este plan incorporará las consideraciones ambientales que permitan incrementar la productividad y la calidad del café con prácticas amigables con el medio ambiente. El resultado: se conserva la Amazonía y el buen sabor de un café, ahora aliado de los bosques.