Ante el desabasteciendo en los centros de salud del Estado, los medicamentos pueden costar entre S/1680 y S/7000. En muchos casos, el SIS cubre dichos gatos.
La actual polémica gira en torno a los precios de los medicamentos. Por un lado se tiene el monopolio de las farmacéuticas con las fusiones que se ha venido desarrollando en los últimos meses, seguido por la mala infraestructura de los centros de salud y ahora el alza del precio de los medicamentos. Y dentro de este último, el alza de los medicamentos contra el cáncer.
Y los pacientes bien lo saben. Tal es el caso de Ana María Vizarreta, de 68 años, una paciente del Minsa, a quien le extirparán el cáncer de colon con una operación que la mantuvo internada desde el 7 de enero hasta el 27 de febrero pasado. Su perseverancia le permitió ganar la batalla contra el cáncer.
No obstante, esa batalla pasaba por confrontar la desatención del Estado ya que muchas veces tuvieron que comprar en la calle los medicamentos que no se encontraban en el stock del hospital. Por ejemplo, las ampollas de Oxaliplatino, un anticancerígeno que se administra en inyectables y que, según el Observatorio del Digemid, tiene un precio entre S/714 y los S/1680, pero que la familia de Ana María tuvo que comprar en S/220.
«Por suerte el SIS me está ayudando y mis 7 hermanos me apoyan cuando no hay algunas cosas. Aparte de esa medicina, también me pidieron una proteína en ampolla que costaba cerca de S/230 y que tenía que comprar cada 3 días», cuenta Ana María.
La victoriosa mujer que derrotó a la enfermedad también nos dice que el costo económico de esa lucha ascendió a S/18 000.
Lucrando con la salud
El decano del Colegio Químico Farmacéutico de Lima, Javier Llamosa, expresa su malestar por este caso ya que solo es una muestra de cómo se lucra con la salud de la población en el Perú. Por ejemplo, Trastuzumab, una ampolla usada para tratar el cáncer de mama y que en el Perú solo es importada por laboratorios Roche bajo el nombre de Herceptin.
«Ese medicamento cuesta S/7000. Una mujer que padece cáncer de mama puede necesitar hasta 10 ciclos, es decir cerca de S/70 000. Es un medicamento biotecnológico que en el Perú no tiene competidores y el precio es el más alto comparado con todos los países de la región», dice Llamosa.
Según el Observatorio de Digemid, el precio mínimo de Trastuzumab en el sector público es de S/6240.42. Mientras que en el sector privado, el precio oscila entre los S/7032.91 hasta los S/10 102.07, uno de los precios más altos por encima de Costa Rica, Colombia y Uruguay.
Otro de los medicamentos que se manejaba en el mercado es el inyectable Infliximab, cuyo fin es tratar la artritis reumatoidea, que hoy tiene un costo de S/3490.10, según Digemid. El único importador de la misma era el laboratorio Johnson & Johnson. Cuando se rompió el monopolio el producto, el precio bajó considerablemente.
«El año pasado, se desestimó una medida cautelar que impedía que ingresen competidores. Luego, se registró el primer competidor y, en el proceso de compra pública, el competidor vendió Infliximab en S/840 frente a los S/2040. Solo en la compra de diciembre del 2017, el Estado se ahorró cerca de S/7 millones», asegura Llamosa.
Si bien el Seguro Integral de Salud (SIS) prioriza la atención de quienes padecen esta enfermedad, los anaqueles suelen encontrarse vacíos obligando a los pacientes a asumir el gasto.
Con la adquisición de Inkafarma a Mi Farma, la preocupación por un nuevo manejo de los precios ha llevado el tema a discutir en el Congreso donde se están presentando diversos proyectos de ley multipartidarios para ejercer un control en los precios.
C.Q.R.