En el distrito de Comas desde la madrugada se pudo observar una gran cantidad de personas haciendo cola en el Hospital Marino Molina con el objetivo de poder optar por uno de los test de descarte.
Pero ante la gran demanda y las largas filas, muchos ciudadanos optaron por llegar al lugar con bancos e incluso hasta frazadas, haciendo más llevadera las horas de espera hasta llegar a ser atendidos.
Pero como todo no es color de rosa, algunas personas no respetaban el distanciamiento social estipulado por el Estado. Hubo también quienes no tenían las mascarillas debidamente puestas, todo esto pese a que en esas filas existen personas contagiadas con la COVID-19.
Se siguen repitiendo reclamos de los ciudadanos aludiendo que no existen suficientes test para la demanda que se requiere. Una pareja de enamorados que se encontraba en la fila comentó que estuvieron haciendo cola en el Hospital Negreiros, en el Callao, por más de tres horas, pero no lograron acceder a una prueba de descarte. Por lo cual decidieron acudir hasta Comas.
“Llegamos a las diez de la noche al Hospital Negreiros. Hicimos cola de tres horas para que nos digan que no nos van a atender. Venimos a este hospital y desde las tres de la mañana estamos acá”, mencionaron.
