El presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, se había comprometido el lunes 27 de junio en recibir a los integrantes de la Comisión de Fiscalización para dar declaraciones sobre el caso Sarratea. Sin embargo, en última momento, se negó en darles pase a Palacio de Gobierno.
En primera instancia, su abogado, Benji Espinoza, había anunciado a los medios de comunicación que su defensa no iba a recibir a los legisladores a las 9:30 a.m. “No va a recibir a la Comisión porque esta Comisión no busca la verdad ni actúa objetivamente, la declaración del presidente sería una puesta en escena, una pantomima, una apariencia de debido proceso”, mencionó Espinoza. Sin embargo, al momento de anunciarlo, no había ingresado formalmente al Congreso sobre el cambio repentino de la decisión de Castillo.
Por su parte, el presidente de la Comisión, Héctor Ventura, cuestionó al Jefe de Estado porque «hay documentos formales en los que se ha coordinado para que hoy (lunes 27 de junio) el presidente declare en calidad de investigado«. Mediante una conferencia de prensa realizado a las 9:10 a.m, el legislador fujimorista señaló que no les enviaron ningún informe sobre la ausencia de Castillo en su recibimiento, por lo que fueron a pie hasta el Palacio de Gobierno. Sin embargo, después de dos minutos, se estaba anunciando por mesa de partes del Gobierno que Castillo Terrones no iba a recibir a la Comisión de Fiscalización.
Ante ello, Ventura mencionó que «en todo momento la comisión de Fiscalización buscó obtener su versión, respetando el debido proceso. Su defensa lo induce a error. Ante todo, esto, solo queda una conclusión: el presidente no quiere dar la cara”, recordando incluso que van cuatro veces citando al Jefe de Estado desde marzo.