Ell Pleno de la Junta Nacional de Justicia destituyó a Liz Patricia Benavides Vargas de su cargo como fiscal suprema del Ministerio Público y, por ende, como Fiscal de la Nación. Esta decisión se tomó debido a que ella intervino en la investigación contra su hermana Enma Benavides y por remover a la fiscal Bersabeth Revilla sin una justificación adecuada y tratándola de manera degradante.
El pleno de la JNJ estuvo integrado por Antonio de la Haza Barrantes, quien actualmente ejerce como presidente, María Zavala Valladares, que actuó como vocera principal, Imelda Tumialán Pinto, Guillermo Thornberry Villarán y Marco Falconí Picardo, los cuales decidieron la destitución de Patricia Benavides.
Otra de las causas de su remoción fue haber beneficiado a Miguel Vegas Vaccaro al nombrarlo como fiscal adjunto supremo provisional, a pesar de las sanciones disciplinarias que tenía. En ambos casos, Patricia Benavides cometió una falta disciplinaria muy grave según lo establecido en la Ley de la Carrera Fiscal.
La JNJ, también, decidió remover de su cargo a la jueza superior Enma Benavides Vargas y a la fiscal Azucena Solari Escobedo.
En el caso de Enma Benavides, fue destituida por mayoría debido a su desempeño como jueza superior de la Corte Superior de Justicia de Lima, ya que se comprobó que interfirió en la labor fiscal para favorecer su posición en la investigación penal en su contra y por haber mentido al público en sus declaraciones y a la prensa nacional sobre sus antecedentes disciplinarios, cometiendo faltas muy graves según lo estipulado en la Ley de la Carrera Judicial. Aunque los cinco miembros coincidieron en la existencia de una falta disciplinaria,
Por su parte, Azucena Solari fue sancionada de manera severa debido a su falta de imparcialidad al validar sin cuestionamientos los informes que llevaron a la destitución de Bersabeth Revilla Corrales. Esto constituyó una violación grave de las normativas de la Ley de la Carrera Fiscal.