Dieciséis áreas del país conocidas como departamentos pasarán a estar en confinamiento a partir de este viernes en medio de una tercera ola de infecciones que incluirá la totalidad de la región île-de-France, incluida París, y la región norte del país. La región de los Alpes Marítimos, donde se encuentra Niza, también estará confinada y se prohibirá viajar desde los departamentos cerrados.
En las áreas bajo confinamiento, las escuelas permanecerán abiertas, pero las escuelas secundarias se limitarán a la mitad de su capacidad como parte de las medidas. Las tiendas que no sean esenciales deberán cerrar, mientras que las librerías podrán permanecer abiertas, asimismo las personas podrán caminar y practicar deportes sin límite de tiempo, pero antes deberán tener un formulario de justificación y permanecer dentro de los 10 kilómetros de sus hogares.
Citando un estudio del Instituto Pasteur, Castex dijo que el 29% de los casos provienen de las áreas de trabajo. Aseguró que la mitad de las infecciones en el trabajo se debían a que las personas iban a trabajar mientras tenían síntomas. Él imploró que la gente trabajara desde casa al menos cuatro de cada cinco días.
El primer ministro francés dijo que la situación había empeorado considerablemente en el país, y que la variante del Reino Unido ahora representa casi el 75% de los casos. Las personas más jóvenes y saludables están ingresando en cuidados intensivos, donde están hospitalizadas por períodos de tiempo más largos, indicó. Así también Castex expresó que la aceleración del virus parecía una «tercera ola», ya que el país se acerca a casi 100.000 muertes por la Covid-19.
«Vivir con el virus es no olvidar que puede tocarle a cualquiera en cualquier momento. Pero es vivir de todos modos, y podemos con mascarilla, con medidas preventivas, distanciamiento físico y ventilación de habitaciones», dijo el ministro de Salud, Olivier Véran.
Las nuevas restricciones se producen un día después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, viajara a un hospital en Poissy, en los suburbios de París, para hablar con los trabajadores de la salud. Un trabajador de la salud le dijo al presidente que la situación era preocupante con el ingreso de personas más jóvenes en el hospital. Macron dijo el miércoles que la crisis iba a «golpear muy fuerte hasta mediados de abril», según varios medios franceses.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, dijo en una entrevista con un medio local el jueves que sentía que los dos escenarios propuestos por el gobierno serían «difíciles» para la gente.
Hidalgo dijo que muchas personas viven en apartamentos pequeños y también necesitarán poder caminar afuera en la región. «Tampoco podemos reducir a la gente a trabajar y volver a casa», dijo, y afirmó que un confinamiento de fin de semana parecía «inhumano», pero que respaldaría al gobierno independientemente de lo que decida.
Francia ya había implementado un toque de queda de doce horas a partir de enero que comenzó a las 18:00 CET, después del cual las personas ya no pueden salir a la calle a menos que tengan un motivo, como ir al trabajo o volver del trabajo o una cita médica. Ese toque de queda se trasladará a las 19:00 CET a nivel nacional.
No obstante, las infecciones se han mantenido elevadas en el país, con un promedio de más de 20.000 nuevas infecciones en las últimas semanas. El país registró más de 38.000 nuevas infecciones el miércoles.
Public Health France dijo en su último resumen epidemiológico del 11 de marzo que el 66% de las infecciones en Francia se debieron a la variante más transmisible del Reino Unido. Ese número ahora es casi el 75%, dijo Castex el jueves.
En todo el país, el porcentaje de personas en cuidados intensivos en comparación con el número de camas originalmente colocadas es de alrededor del 83%. En la región de Île-de-France, es del 101%, según la aplicación francesa de vigilancia Covid-19 Tous Anti Covid.
Hasta ahora, 5.5 millones de personas en el país han recibido una primera dosis, lo que representa alrededor del 8.3% de la población total. Para el verano, Francia espera vacunar a 30 millones de personas.
M.A.N.
