Imposible de aceptar. Fue a faltar de 16 minutos para finalizar el compromiso y se desató la locura. Corría los 74’ de la segunda mitad después de que arrancase la discusión, claramente protagonizada por el lanzamiento de objetos a los jugadores del Olympique de Marsella, se produjo la contienda que estuvo cargado de polémica en un partido que no resaltó por lo futbolístico.
El OGC Niza vs Marsella se enfrentaban por la tercera fecha de la Ligue 1, disputado en el estadio Allianz Riviera, en donde el duelo tuvo que ser suspendido cuando los hinchas del conjunto local se metieron al campo a raíz de un enfrentamiento de un tiro de esquina con el francés Dimitri Payet. Dicha jornada quedará marcada por una invasión al terreno de juego por los ‘ultras’ del ‘les aiglons’. Los jugadores visitantes fueron víctimas de la agresión.
Todo comenzó cuando los futbolistas del ‘olympiens’ se cansaron y devolvieron las botellas que los aficionados les lanzaban durante el encuentro. A partir de ahí los hinchas locales empezaron a invadir el campo y agredieron a unos jugadores que, al finalizar el duelo, denunciaron las lesiones y marcas que les dejaron los hechos sucedidos.
Tras los terribles incidentes, Luan Peres Petroni (defensa) y Mattéo Guendouzi (mediocampista) mostraron ante las cámaras las marcas de los golpes que recibieron. El brasileño y francés sufrieron varias heridas y en los próximos días estarían regresando a los respectivos entrenamientos.
Además, según informó varios medios locales, Payet sufrió varios cortes en la espalda tras haber recibido golpes producto de la invasión. De hecho, el delantero fue quien recibió el proyectil que desataría el terrible suceso. En los próximos días se tomará una decisión al respecto del tema.
Partido suspendido
Luego de casi una hora de interrupción, el árbitro del compromiso y los futbolistas del Niza se presentaron en el césped, pero el conjunto dirigido por Jorge Sampaoli decidió no presentarse y abandonar el estadio.
El presidente de los locales, Jean-Pierre Rivére, fue a pedirle calma a los hinchas. Después, en los vestuarios y con los ánimos hasta el suelo, se decidió reanudar el partido, a lo que los visitantes se negaron. El referí y los locales saltaron al campo, pero los ‘blancos’ no aparecieron y tuvieron que suspender el choqué. Ahora todo queda pendiente de la resolución que adopten en los próximos días las autoridades deportivas del fútbol francés.