La puesta en escena presenta a dos hombres desempleados aficionados a las historias de espionaje que se conocen por casualidad y encuentran una misteriosa maleta que los termina enredando en el submundo de una mafia de mesas de juego clandestinas. Una sexy bailarina de pole dance y una carta trucada les permitirán infiltrarse entre los malhechores para resolver su primer caso. ¡Receta perfecta para el desastre!.
“Los tres actores hemos compartido muchos proyectos, siempre creando desde cero y desarrollando las historias como un equipo. La química entre nosotros es muy especial. El Primer Caso de Black & Jack es un juego que jugamos muy bien, y como todo juego, es divertido, e invitamos al espectador a divertirse con nosotros”, cuenta Manuel Gold
“El primer caso de Black & Jack” es una producción de Gestus, productora responsable por obras premiadas como “Los Fabulatas”, “Submarinos” y “Llámame Mamá”. Todas obras de humor y creadas bajo la creación grupal.
“Empezamos a ensayar con el afán de reírnos del caos. Así creamos este espectáculo. Usando lo que nos puede molestar o divertir en relación al mundo y a la actitud de estos personajes, dentro situaciones sin filtro encontramos que mucho de lo que hacemos en escena son críticas hacia la hipocresía y los estereotipos que aún podemos encontrar por ahí. Así el humor empieza a ir más allá de la risa y nos muestra la realidad en que la vivimos, además visibilizar lo que creemos que debe ser cambiado en la sociedad. Percibimos que lo que nos provoca carcajadas es el ridículo de haber personas reales reflejadas en estos personajes absurdamente obsoletos, como el “mega machista”, “la feme fatal agresiva” y “el homofóbico bulero. Todos con algo que esconden volviendo su “lado oscuro” en cómico justamente por andar a la sombra y por ir contradicción con su discurso”, comenta la directora de la obra, Paloma Reyes.
A la obra “El primer caso de Black & Jack” le decimos “La comedia prohibida” porque fuimos censurados en nuestra primera temporada. La administración de un teatro no entendió nada de la propuesta en un ensayo en el inicio de la creación y nos sacó de su cartelera sin siquiera saber cómo se construía la obra. Y claro, son personajes “lisurientos”, juegan con la sexualidad, son malcriados y amorales, absolutamente incorrectos. Las dos temporadas anteriores fueron exitosas en términos de público y de crítica y creemos que es porque es una obra muy visual y el público fácilmente reconoce a los estereotipos y entienden a qué vamos y de qué “lado” estamos”, señala.
Para la primera temporada la actriz Jely Reátegui se enfrentó con el reto de aprender pole dance, disciplina acrobática que se volvió parte de su rutina hasta ahora, 5 años después.
“Después de la última temporada, en el 2019, he seguido practicando exotic pole porque dentro de mí siempre tenía la esperanza de reponer la obra. Es muy emocionante poder volver y nos vamos a divertir demasiado como siempre”, cuenta Jely Reátegui
“El primer caso de Black & Jack” va todos los viernes y sábados a las 8 p.m. y domingo a las 7 p.m. desde el 4 de agosto en la Sala Quilla en la Av. Bolognesi 397, Barranco.