Los chicles, los insecticidas y las máquinas de afeitar, son algunos de los objetos que se utilizan a diario y que habitualmente son desechados de una manera incorrecta, provocando un efecto perjudicial al medio ambiente, contó el químico Benjamín Ruiz Loyola.
Según el especialista, algunas de las malas costumbres al momento de deshacerse de los objetos ya mencionados y de otros como los medicamentos o las colillas de cigarro contribuyen a que generen problemas ambientales como la mala calidad de aire y de agua e incluso el mal funcionamiento de los sistemas de alcantarillado.
Con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, el especialista expresó que el mal uso de los productos engloba no únicamente su utilización, sino en la manera en cómo se desechan, algo que la población debe comprender.
-Máquinas de afeitar
En objetos como las máquinas de afeitar desechables, el riesgo de contaminación viene por dos motivos. Uno de ellos es el plástico con el que vienen fabricadas, el otro viene del metal con el que cortan el vello, que si no es bien desechado puede acabar oxidándose.
´´La forma correcta es agarrar las maquinillas de afeitar una vez ya usadas, es meterlas en una bolsa de plástico y entregarlas en mano a los recolectores de basura´´, recomendó el profesor de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
-Insecticidas
Lo mismo ocurre con los insecticidas, por ejemplo, una vez que ya cumplen su función de exterminar cucarachas o mosquitos, el recipiente es tirado a la basura, ´´aunque este aún contenga restos del insecticida´´.
La manera más adecuada en estos casos es lavar el bote que contiene el recipiente o simplemente ser separado en una bolsa completamente independiente y se entrega así a los recolectores de basura.
-Chicles y tabaco
Muchos de estos productos son desechados directamente a la calle en lugar del cubo de basura, lo que ocasiona que muchas veces se acumulen grandes cantidades de plástico y este bloque el correcto funcionamiento de los sistemas de alcantarillado.
