Novak Djokovic tiene la difícil misión de defender sus 2.600 puntos de aquí a la final de temporada, aunque el serbio no puede asegurar su participación en Shanghái, París, Las Nitto Finals de Londres y las finales de la Copa Davies de Madrid.
El número uno del mundo, arrastra problemas en el hombro izquierdo desde que participó en Masters 1.000 de Cincinnati en que le gano la final al suizo Roger Federer, sin embargo, se fueron acentuando con el paso de las semanas y que derivaron en su retirada en octavos del US Open cuando se enfrentaba a Stan Wawrinka.
Ahora, el campeón de Wimbledon ha decidido regresar a una clínica Suiza en la que se trató en 2018 de su lesión del codo derecho exitosamente, con el fin de que el resultado sea el mismo. La idea del tenista serbio, es evitar el quirófano, pero que desde luego no se descarta una posible intervención en caso de que un tratamiento conservador no lo haga mejorar.
Djokovic se ha puesto en manos del mismo equipo que ya lo trató del codo, en ese momento arrastraba molestias en su articulación desde la segunda parte del año 2016 y en el Open de Australia 2018 jugó vendado hasta que cayó en octavos. De allí se fue directo a Zurich donde fue operado mediante una técnica poco invasiva que le permitió volver a competir en India Wells.
A.T.A.
