En nueva Zelanda, un nuevo caso ha alarmado sobre las prácticas realizadas en la acupuntura, pues una acupunturista perforó accidentalmente los pulmones de una paciente mientras le insertaba agujas en los hombros, según el informe médico elaborado por el Comisionado de Salud y Discapacidad de dicho país
El hecho se dio cuando una mujer de 33 años acudió a una clínica de acupuntura para tratarse de los dolores generados por la lesión en uno de sus brazos, para ello se le aplicó el procedimiento conocido en la medicina china como el punto de presión «Jian Jing» o «vesícula biliar 21», ubicada cerca a la parte superior de los hombros, la cual le fue perforada, desencadenando un colapso pulmonar.
Según indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), el área de la vesícula biliar 21 es una de las zonas más delicadas del cuerpo, pues en su interior se encuentran ubicados los extremos puntiagudos de ambos pulmones, cuya superficie se halla a solo 10 o 20 milímetros por debajo de la piel.
La organización también reveló que cerca de un 30 % de los casos diagnosticados con neurotomax (presencia de aire exterior en la cavidad de la pleura y pared torácica), se deben a la inserción de las agujas producidas en la acupuntura. Asimismo, el Comisionado de Salud y Discapacidad señaló que en este caso se violaron algunos códigos de salud y derechos de los consumidores.
Por último, las autoridades recomendaron a los pacientes informarse adecuadamente sobre los procesos terapéuticos a los que se someten, además, se recomendó a los especialistas a recibir una mejor capacitación adicional para la aplicación de dicho procedimiento curativo y así evitar acciones producto de la negligencia.
