La violencia hacia la mujer es un problema que afecta a miles de estas en el Perú. Muchas mujeres sufren violencia física, sexual y psicológica dentro del entorno en el que viven. Puede ocurrir en sus centros de trabajos, en sus hogares o hasta en la calle. Sin embargo, una gran cantidad no se atreve a denunciar ya sea por vergüenza, temor o falta de información sobre qué hacer ante el hecho.
Si usted es víctima de cualquier tipo de violencia o conoce a alguien que la sufra, en la presente nota se brindará la información sobre cómo enfrentar la situación y a qué lugares recurrir para recibir el apoyo inmediato que se necesite.
La psicóloga del Centro de Salud Mental Comunitaria (CSMC) Nuevo Perú Elaine Chávez Córdova, indicó que se considera violencia hacia la mujer a cualquier acción u omisión que se cometa en contra de ella dentro del transcurso de su vida. Puede ocurrir dentro de la familia o dentro de la comunidad y muchas veces es tolerada o cometida por el Estado.
Los tipos de violencia pueden ser físico, psicológico, sexual, económico y/o patrimonial siendo la violencia psicológica la de mayor ocurrencia. Este tipo se caracteriza por presentar humillaciones, comparaciones y vejaciones. El segundo tipo de mayor ocurrencia es la violencia física, que consiste en dañar a través de bofetadas, empujones, y otro tipo de golpes que pueden terminar en feminicidio, aseguró Chávez Córdova.
En lo que va del año, el Ministerio de Salud (Minsa) ha atendido 101,273 casos de violencia contra la mujer, siendo la población más afectada las mujeres de 30 a 59 años (39,845 casos), seguido de mujeres de 18 a 29 años (25,993 casos). Es decir, cada día se han registrado entre 5 a 6 casos por violencia en cada establecimiento de salud a nivel nacional.
Por ello es importante prestar atención a los signos que una persona violentada pueda presentar: sentirse bajo de ánimo, perder las ganas y el disfrute de hacer sus actividades diarias, baja autoestima, caer en comparaciones continuas y la irritabilidad.
¿Qué hacer?
Livia Ramos Calsín, enfermera licenciada del CSMC San Borja, informó que el centro puede recibir a todas las mujeres que hayan sufrido de violencia para otorgarles la atención de manera integral y oportuna.
La profesional aseguró que la persona que se acerque por cualquier tipo de violencia (sexual, física, o psicológica) será referida al área de admisión donde se le realizará una entrevista para recopilar datos y conocer su estado de salud mental. Luego de ello se le envía al servicio correspondiente, ya sea niña, adolescente, adulta o adulta mayor víctima de violencia para continuar con el flujo de atención.
“Se cuenta con un equipo multidisciplinario especializado y preparado para el abordaje de este tipo de casos. Además, para la persona víctima de violencia, se elabora un plan individual después de la evaluación integral de acuerdo con sus necesidades. Se le involucra para poner el plan en ejecución, que incluye visitas domiciliarias y servicio social”, agregó la licenciada.
Por último, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) a través del Programa Nacional para la Prevención y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar – Aurora, diseña y ejecuta acciones y políticas de atención, prevención y apoyo a las personas involucradas en hechos de violencia familiar y sexual, contribuyendo así a mejorar la calidad de vida de la población.
Entre los servicios que ofrecen están:
Centros de Emergencia Mujer (CEM)
Línea 100
Chat 100
Servicio de Atención Urgente (SAU)
Hogar de Refugio Temporal (HRT)