La Superintendencia Nacional de Migraciones, en coordinación con la Policía Nacional del Perú, realizó 1,123 operativos de verificación y fiscalización migratoria en el primer trimestre del año, lo que permitió la expulsión de más de 760 ciudadanos extranjeros por infringir la normativa vigente.
Las intervenciones se concentraron en regiones como Puno, Pucallpa, Tumbes, Tarapoto y Lima. En estos operativos se verificaron documentos para controlar la identidad y situación migratoria de los intervenidos, utilizando dispositivos electrónicos conectados a bases de datos en tiempo real.
A los infractores se les aplicó el Procedimiento Administrativo Sancionador Especial Excepcional (PASEE), que permite su expulsión en un plazo máximo de 24 horas, al haber ingresado de forma irregular o representar una amenaza para la seguridad y el orden interno.
Además, se desplegó una oficina móvil con conexión satelital y módulos de atención, que facilita el inicio de procesos sancionadores en el lugar de la intervención, en coordinación con el Ministerio Público, Sunafil y autoridades locales. Estas acciones forman parte de una estrategia integral para reforzar el control migratorio y garantizar la seguridad ciudadana en todo el territorio nacional.
