Tras el anuncio del presidente norteamericano, Donald Trump, de incrementar los aranceles a la importación de acero y aluminio, especialistas en el tema además de las clasificadoras de riesgos internacionales mostraron su preocupación calificando el anuncio como una guerra comercial a nivel global y que afectaría a nuestro país.
Juan José Marthans, director del área de Economía de PAD, advirtió que nuestro país, al ser exportador de materias primas minerales, podría verse afectado provocando caída en el precio de los metales afectando, como consecuencia, en el crecimiento de la economía.
«Podría haber un impacto si esta suerte de amenaza de Trump se hace 100% efectiva y existen respuestas de la economía China. Eso podría generar una tendencia no deseada a una reducción de precios de ciertos metales. Con ello, la situación no sería la mejor para el crecimiento esperado de Perú este año. Tendríamos dos olas negativas para el crecimiento: la incertidumbre política y los precios de ciertos commodities no estarían a favor de nuestra economía», expuso Marthans al diario La República.
Economías siamesas
A pesar de la tensión generada por una eventual “guerra comercial” el representante de PAD mantiene optimismo al considerar “siamesas” a las economías de China y EEUU norteamericana. Razón por la cual ambas potencias tendrían que evaluar bien de las consecuencias en su contra.
«Estas dos economías van a ser cuidadosas porque una depende de la otra. Tanto comercialmente como el punto de vista financiero, ambas están ligadas. El deterioro de una podría tener un impacto negativo en la otra. Es cierto que compiten, pero son economías de carácter siamés. Esta posible guerra de aranceles pueda ser reevaluada en un tiempo. De ser reevaluada, el impacto sería mínimo para Perú, de ser efectiva, tendríamos que explorar lo que podría suscitarse», explicó el especialista.
Economía peruana afectada
Para Marthans, el Perú tiene una economía emergente debido a esto sería la más afectada de concretarse las “medidas Trump”.
“El peor escenario es el de una guerra arancelaria y comercial. No hay ganador neto, todos salen perdiendo. Las que más perderían serían las emergentes, pequeñas y abiertas, como Perú. Sin embargo, el impacto sería menor que otras economías porque Perú aún tiene buena participación de reservas internacionales y porque el porcentaje de deuda pública es uno de los más bajos de la región», sostiene Marthans.
Aranceles y TLC
Es de conocimiento que para el presidente norteamericano, los Tratados de Libre Comercio (TLC) no se ajustan a los intereses de su país, ante esto manifestó que podría eliminar los aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Canadá y México si es que se logra «un nuevo y justo» TLC con estos países. No obstante aclaró que no va a retroceder en sus medidas económicas a pesar del rechazo internacional. «No creo que vayamos a tener una guerra comercial», dijo.
C.Q.R
