El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se comprometió este martes a llevar a cabo una reforma agraria para que no sea necesario «invadir tierras» durante su gobierno.
«Vamos a fortalecer la pequeña y mediana propiedad, vamos a fortalecer la agroindustria, vamos a seguir haciendo la reforma agraria, porque donde se necesite asentar a gente, la vamos a asentar (…). Ya no hay necesidad de invadir tierras», dijo
El mandatario izquierdista hizo estas declaraciones en un conexión en directo por las redes sociales desde el Palacio de la Alvorada, la residencia oficial, tras varias denuncias de ocupaciones del Movimiento de los Sin Tierra (MST), una organización muy cuestionada por los ruralistas y que apoyó su elección.
«Si el Incra (el Instituto Nacioanal de Colonización y Reforma Agraria) comunica al gobierno cuáles son las tierras improductivas que existen en cada estado brasileño, a partir de ahí vamos a discutir la ocupación de esa tierra. Es simple. No hay necesidad de ruido, no hay necesidad de guerra. Lo que se necesita es competencia y capacidad de ocupación», agregó.
El mandatario, cuestionado por parte del poderoso sector del agronegocio (mayoritariamente bolsonaristas), dijo que «nunca tuvo problemas» con ese poderoso sector, que le acusa de apoyar las invasiones en un país donde hay mucha concentración de tierras en pocos manos.