El musical, que tras un exitoso paso por el Teatro Julieta llega al Teatro Británico, nos presenta una historia sobre la crianza y sus tabúes. Con un padre y una madre llenos de sueños para sus hijos, pero que también depositan en ellos sus expectativas y frustraciones.
El director de la obra, Fito Valles señala que “Me capturó que se vaya construyendo una relación un poco huraña entre estos padres que intentan proteger a sus hijos. Ellos están convencidos de que son los mejores papás, pero hay falta de conversación en casa, desatención y ellos están tratando de justificarse”.
Los personajes de la obra son Claudio (Miguel Álvarez) es el papá de Patricio, y Sandra (Érika Villalobos), la mamá de Lola. Sus hijos no son mejores ni peores que otros, pero sí especiales. Y, como buenos padres, están convencidos de que todo lo que hacen por ellos es lo mejor.
“Los musicales, en su mayoría, nos muestran un momento de espectacularidad (con el baile, ensamble, el color) y esta obra no va por ese lado”.
Para el director, los mountros a veces no sólo los que los niños imaginan, sino también aquellos con rostros conocidos, mamá y papá. “Todos somos parte de esta sociedad que ha normalizado muchas conductas. Sin irnos a otro tema, somos una sociedad machista y el personaje de Claudio, en su afán de querer tener un niño top A1, a veces peca de malas formas”. “Los Monstruos” es un musical que no teme incomodar y que nos invita a bucear en nuestra propia monstruosidad
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