El derrame de petróleo de la refinería La Pampilla de la multinacional Repsol en las playas de Ventanilla d y que posteriormente se ha expandida a varias zonas más, trae consigo la interrogante del impacto ambiental tanto en el mar como en las especies que ahí habitan.
Fueron 6000 barriles los que se vertieron en el mar, por ahora las autoridades han volcado sus esfuerzos en controlar el problema por lo cual no se puede saber con exactitud los daños generados en el ecosistema.
El primer impacto que genera un derrame de petróleo es la creación de una película sobre la superficie marina, lo cual impide la entrada de la luz provocando así que las algas no realicen la fotosíntesis. Además, debido a la toxicidad del crudo muchos organismos mueren por envenenamiento en un proceso que es conocido como contaminación aguda. Todo esto genera una alteración en la cadena alimenticia, pues muchas son las especies que no podrían sobrevivir ante la ausencia de alimento.
Sin lugar a dudas los ecosistemas que dependen de algas y plantas son los más afectados cuando ocurren episodios de este tipo, al igual que las praderas marinas. Un derrame oro negro contamina arrecifes de coral, perjudicando a especies como esponjas. Pero las especies que habitan en la superficie también son los agraviados, como las aves que han visto afectado su plumaje y sus vías respiratorias.
“Según el reporte de personal nuestro tenemos aves guaneras muertas, especies moribundas que están cubiertas de hidrocarburos y especies desorientadas, que todavía no tienen un lugar donde alejarse porque los lugares donde suelen estar están intervenidos por el crudo”, había informado la responsable de la Unidad de Gestión Ambiental del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), Melina Tamara.
El biólogo y experto en ecosistemas y humedales costeros de la Universidad Científica del Sur, Héctor Aponte, señaló que especies como moluscos, mejillones, ostras y las almejas, que son especies que se alimentan de filtrar el agua, son exterminadas casi al completo con el derrame de petróleo.
“Con un derrame de petróleo, el medio marino se ve alterado. Desde los componentes del plancton hasta las aves marinas que se alimentan de los peces e invertebrados que habitan esta zona; al estar todos conectados, todos los eslabones de la cadena se ven afectados. Por ello es importante prevenirlos”, añadió.
Pero si el derrame se da cerca de la zona costera, más especies serán las afectadas. Si bien hay ecosistemas que se pueden recuperar de manera más rápida, los de fondos marinos o zonas costeras pueden demorar incluso hasta un siglo. Todo depende de cuanto penetró el petróleo en la arena y el fango, que tarda más en descomponerse y recuperarse.