Con la pandemia del covid-19, la estadística en cuanto a los casos se vieron afectados frente a la disminución de asistencia de pacientes a las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud, debido a las restricciones y temor del paciente.
Principalmente se ven afectados las mujeres antes de los 40 años de edad y a hombres y mujeres por igual después de los 50 años de edad. En 2021 se reportaron 959 casos, de los cuales, 641 fueron en mujeres y 315 en varones, según evaluaciones.
Los pacientes con esta afección presentan debilidad fluctuante, que empeora con actividades repetitivas, calor y estrés, así como, afectación de grupos de músculos oculares, bulbares, de las extremidades y del cuello.
En lo ocular la enfermedad se manifiesta con diplopía fluctuante y ptosis. Mientras que, la implicación bulbar se presenta a través de la dificultad para masticar, disfagia y disartria.
Debilidad muscular generalizada en brazos y piernas es lo que sienten algunos de estos pacientes, que puede convertirse en grave con debilidad muscular respiratoria, lo que dificulta la respiración en el humano.
Antes de los 18 años de edad es cuando se presenta en los jóvenes esta patología(miastenia gravis juvenil) y los pacientes también comienzan con debilidad muscular ocular y posible debilidad muscular generalizada en el cuerpo.
Hijos de mujeres con esta enfermedad, con tiempo de nacidos, manifiestan una forma neonatal transitoria que causa hipotonía y dificultad para alimentarse (miastenia grave neonatal transitoria).
Lamentablemente aún no existe ningún tratamiento de cura para esta enfermedad, pero si para mejorar. Aún queda mucho por hacer en cuanto a la investigación de la enfermedad, conocer sus causas y lograr un tratamiento definitivo para la cura de esta patología.
F.H.F.C.