La siembra y cosecha de agua, actividad ancestral que consiste en usar el agua de lluvia que de manera natural se forma en especies de reservorios de agua en las zonas de más altitud del país, viene siendo en los últimos años la solución para las poblaciones del Perú profundo quienes carecen de agua potable, sufren de sequías más de la mitad del año y subsisten de la agricultura familiar.
La Unidad Ejecutora Fondo Sierra Azul (UEFSA), entidad del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego tiene como compromiso “Generar seguridad hídrica e incrementar el desarrollo de infraestructura de riego de manera planificada y priorizada en el territorio, con enfoque de cuenca y respondiendo a la demanda, especialmente de la agricultura familiar, como indica el 4to lineamiento de la Segunda Reforma Agraria que estipula el presente gobierno, por ello no sólo intervenimos en diques de qochas, sino también reforestamos y protegemos praderas, así como dotamos de trabajo a los comuneros de las zonas donde se interviene una qocha“ indica su director ejecutivo el Eco. Marco Antonio Ponce Rosales.
“En la UEFSA intervenimos con la construcción de diques para qochas, que son estructuras construidas al borde de la qocha -con mano de obra íntegramente de los pobladores aledaños- lo cual no permite que el agua que se ha almacenado en tiempos de lluvia de manera natural se rebalse, sino que se mantenga para que así mediante el proceso de infiltración riegue en tiempos de sequía las tierras y dé de beber a los animales del campo. Si no fuera porque se edifican los diques, el agua de lluvia se perdería ocasionando en lugar del riego lento y continuo, la devastación de los sembríos y por ende, la generación de más pobreza” puntualizó el director ejecutivo.
Cabe destacar que la UEFSA inicia en el presente mes de junio el primer bloque de ejecución de obras, que además de abocarse a los diques en qochas, también realizan Zanjas de infiltración, Amunas, Reforestación y Protección de praderas, solicitudes que hace el pueblo a través de sus gobiernos locales con quienes se coordina constantemente. Las regiones con las que inician las obras este 2022 son Ancash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Huancavelica, Junín, Lima provincia y Puno, beneficiando en éste primer bloque a un total de 5,475 familias de las zonas altoandinas del país.