La nanomedicina o cómo usar lo diminuto para curar grandes males

Diferentes investigadores están utilizando las nanopartículas para desarrollar medicinas contra el cáncer.

La nanomedicina está provocando una revolución en la medicina. Foto: internet

Las nanopartículas se han convertido en un boom por la versatilidad que conlleva, entre su uso en los compuestos electrónicos y las vacunas contra el COVID-19. Las propiedades de estas minúsculas partículas también son muy beneficiosas para combatir el cáncer y generar diferentes medicamentos.

Las nanopartículas se pueden encontrar en diferentes protectores solares. Asimismo, por sus grandes beneficios está siendo investigado por diferentes científicos para corroborar si puede ser utilizado en diferentes medicinas y el asombro de las propiedades que tiene, a pesar de ser infinitamente pequeño.

“Las nanopartículas miden de uno a algunos cientos de nanómetros”, una unidad que equivale a una milmillonésima parte de un metro, explica.

“Lo más importante a entender es que se trata de un ensamblaje de varias moléculas con distintas funciones”, añade.

La función de la nanomedicina es “fabricar estructuras que se parecen en talla a los virus. Cuando ponemos juntas moléculas en una nanopartícula, esto genera funciones nuevas y múltiples, este es el interés del nanobjeto”, expone Coll.

La función de las nanopartículas en la vacuna del COVID-19 es transportar el ARN, protegerlo y llevarlo a su destino. Esta acción es realizada en todos los medicamentos que contienen esta diminuta materia.

Lo más innovador hasta el momento, es la producción de medicamentos contra el cáncer con la biotecnología Nanobiotix, teniendo como protagonista a una nanopartícula de hafnio, un metal que tiene la capacidad de absorber radiaciones. La fórmula será inyectada en lo pacientes que están recibiendo tratamientos de radioterapia.

“La radioterapia genera daños antes y después del tumor, lo que limita el uso de dosis fuertes”, explica Laurent Levy, fundador de esta firma. Para que esto no pase, “introduciremos localmente pequeños objetos que van al interior de la célula cancerígena y que van a absorber la energía de la radioterapia. Este producto aumentará la eficacia sin aumentar la toxicidad en el exterior del tumor”, agrega.

De igual manera, la sociedad francesa NH Ther Aguix está buscando originar un medicamento que ayude a las radioterapias realizadas para tumores. Pero, los investigadores indican que desarrollar estos fármacos va a tomar mucho tiempo por la falta de financiación a la nanomedicina.

“La nanomedicina es rica en aplicaciones, pero va con retraso por la naturaleza de los objetos manipulados y la dificultad de obtener un producto cuya composición esté garantizada en cada lote”, indica Jean-Luc Coll.