El Pleno de la JNJ ha votado a favor de suspender al fiscal supremo y ex fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, por un período de 120 días. Esta decisión se basa en una falta muy grave que cometió al recibir tres salarios entre septiembre de 2020 y junio de 2021. Los magistrados María Zavala, Guillermo Thornberry, Marco Falconí y Antonio De La Haza respaldaron la declaración de infundada de la objeción presentada por el investigado y la imposición de la suspensión.
“Habiendo emitido todos los miembros del pleno su voto, por mayoría se resolvió declarar infundida la cuestión previa promovida por el investigado sobre una supuesta imprecisión o falta de claridad. Segundo, imponer la suspensión por 120 días por su actuación como fiscal supremo al haberse establecido que incurrió en una falta muy grave”, comentó el titular de la Junta Nacional de Justicia.
La única abogada que emitió un voto en desacuerdo fue Imelda Tumialán. Aunque estuvo de acuerdo en que el artículo 3 prohíbe que los funcionarios públicos reciban más de una remuneración, señaló que hay una distinción entre recibir un sueldo y una dieta, ya que esta última no implica subordinación.
“La dieta no es un concepto que se considere como prohibición y menos como falta muy grave. Por lo tanto, para la suscrita, el investigado Pablo Sánchez no incurrió en infracción ninguna por lo que debería archivarse el proceso disciplinario”, manifestó.
Según lo expuesto por la consejera María Zavala, los argumentos se basaron en que Sánchez Velarde violó normativas disciplinarias al recibir tres ingresos del Estado: un salario como fiscal supremo, una remuneración por ser docente en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y una dieta por ser miembro del Consejo Directivo de la Academia de la Magistratura.
“El comportamiento del investigado ha sido contrario a la obligación de todo fiscal de mostrar y demostrar probidad, decoro y decencia en el ejercicio de sus funciones, máxime si se tiene presente el artículo V del Título Preliminar de la Ley de Carrera Fiscal que establece a la ética y la probidad como componentes esenciales de los fiscales en dicha carrera”, indicó Zavala Valladares.
Según lo expuesto por la integrante de la JNJ, la conducta de Pablo Sánchez ha generado una “grave afectación a la credibilidad del sistema fiscal y sus integrantes”, por lo tanto, la sanción de 120 días se considera adecuada, necesaria y proporcionada.
DECLARACIONES DE PABLO SÁNCHEZ
Durante la audiencia, el exfiscal supremo defendió su postura negando haber cometido alguna falta ética. Argumentó que la percepción de estos ingresos no violaba la Ley de Empleo Público, ya que, según su interpretación, esta ley solo prohibía recibir más de una remuneración por un cargo público. Sin embargo, María Zavala rechazó estos argumentos al señalar que la prohibición de recibir ingresos duplicados incluye cualquier tipo de ingreso proveniente del Estado.
Zavala sostiene que la suspensión es justa y proporcionada, considerando la conducta atribuida a Sánchez que ha sido verificada. Tanto los documentos presentados como la propia admisión del fiscal confirman que recibió los tres ingresos cuestionados.