El director regional de Salud de Junín, Danny Esteban Quispe manifestó que los contagiados con la variante Delta, se enteraron después de un mes que tenían esta cepa contagiosa.
“Voy a ser claro, cerco epidemiológico se hace cuando tienes un caso aislado y lo puedes cercar, pero cuando esta persona estuvo infectada hace un mes y tu resultado recién te llega y esa persona se trasladó a otro sitio e hizo todo lo que no debía hacer, es imposible hacer el cerco, se ha hecho el aislamiento, pero cuando llegó el informe del Instituto Nacional de Salud, esas personas ya habían pasado ese proceso”, precisó.
Asimismo, acotó que hubo una demora, porque hubo un proceso de secuenciación, que es un proceso no muy sencillo para evaluar el ARN del virus y verificar si tienen el virus.
Respecto a las 8 personas confirmadas con la variante Delta, dijo que no tienen nexo epidemiológico y que cada uno se contagió de otras personas y a su vez estos habrían contagiado a sus contactos o familiares más cercanos, con lo cual las probabilidades que existan más casos es mucho mayor.
Por su parte, el jefe del Laboratorio de Biología Molecular de Pilcomayo, Omar Orellana, señaló que en la región se realiza la vigilancia genómica, la cual se ejecuta seleccionando unas 40 muestras por mes, las cuales deben ser de pacientes con una carga viral elevada, que sean casos de reinfección e incluso de pacientes hospitalizados.
Desde abril a la fecha, se identificó la variante de Brasil, la inglesa, la C-37, y finalmente en julio la variante Delta en los distritos de Huayucachi, Chilca, Huancayo y El Tambo. Omar Orellana, indicó que la medida más importante para enfrentar a la variante Delta de la India, es con la vacunación. Al respecto, espera que esta situación llame a la reflexión a los sectores reacios a la inmunización