INPE alista cárceles: Jóvenes de 16 y 17 años con delitos graves serán juzgados como adultos

Tiberio Martínez, titular de la Dirección de Política Criminológica del Ministerio de Justicia, señaló que los adolescentes responsables de delitos graves ya no serán enviados a centros juveniles, sino que serán recluidos en áreas especiales dentro de penales comunes.


El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) está realizando adaptaciones en los penales para albergar a adolescentes de 16 y 17 años que incurran en delitos graves. Así lo informó Tiberio Martínez, quien lidera la Dirección de Política Criminológica del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjusdh).

Esto se da tras la reciente promulgación de la Ley 32330 por parte del Poder Ejecutivo, norma aprobada previamente por el Congreso, que introduce cambios al Código Penal y al Código de Responsabilidad Penal de Adolescentes. La ley permite que menores de 16 y 17 años sean procesados penalmente como adultos en casos de crímenes graves como homicidio, extorsión o violación sexual.

A pocos días de la entrada en vigencia de la nueva ley, Tiberio Martínez informó que actualmente hay 1,050 adolescentes internados en centros juveniles por delitos graves. De ese total, 727 fueron recluidos por robo agravado, 87 por homicidio calificado, 7 por sicariato, 14 por trata de personas y 69 por violación sexual.

Martínez explicó que quienes cometan este tipo de crímenes ya no serán juzgados como menores, sino como adultos. “Se les aplicarán las normas del sistema penal adulto: serán procesados por un juez penal común y trasladados a penales”, señaló en una entrevista con Ampliación de Noticias. Añadió, sin embargo, que los menores de 16 años y los adolescentes involucrados en otros tipos de delitos seguirán siendo atendidos por el sistema juvenil.

Adolescentes estarán en áreas separadas de los adultos
El funcionario explicó que se están acondicionando zonas exclusivas dentro de los 74 penales del país para evitar que los adolescentes entren en contacto con reclusos adultos y, así, reducir el riesgo de que adopten conductas más violentas.

“La ley también establece un tratamiento diferenciado. El INPE está preparando pabellones o áreas específicas dentro de los penales. Estos adolescentes no compartirán espacios con los adultos que hayan cometido los mismos delitos”, señaló.

Martínez también mencionó que en el penal de Ancón 1 —donde fueron enviados 29 menores considerados de alta peligrosidad tras la reciente fuga en ‘Maranguita’— se está adecuando una zona especial para albergar a futuros internos.

Como ejemplo, indicó que si un joven de 16 o 17 años recibe prisión preventiva o es hallado culpable de un delito grave, será trasladado directamente a una sección exclusiva del penal, sin pasar por un centro juvenil.