En investigaciones recientes han averiguado si es probable que el cambio climático global amplifique las olas de calor en la Antártida, causando aumentos poco probables en las temperaturas.
Este estudio es obra de científicos de la Universidad de Barcelona (UB), el Grupo Antártico de la Agencia Estatal española de Meteorología, el Instituto de Geociencias del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en España y la Universidad de Lisboa en Portugal.
El equipo de Sergi González-Herrero ha publicado los resultados de este estudio, que por primera vez confirman de forma concluyente que el cambio climático es capaz de amplificar las olas de calor en la Antártida. En concreto, el trabajo concluyó que la probabilidad de una ola de calor similar a la registrada en 2020 se ha multiplicado por diez desde 1950-1984, en gran parte debido al cambio climático global.
El nuevo estudio se basa en la investigación de una de las olas de calor más altas jamás registradas en la Península Antártica: la que duró del 6 al 11 de febrero de 2020.
En febrero del 2020 fue inusualmente caluroso en la Península Antártica. La ola de calor de los días 6 y 11 fue una de las más altas jamás registradas en la región: llegó con una temperatura promedio inusual de más de 4,5 °C y dejó un récord térmico de temperatura en la península el 6 de febrero de 2020, con un máximo histórico de 18,3 °C en la base de Esperanza.
Por eso, para determinar el papel que jugó el cambio climático en la intensidad de la ola de calor regional de seis días, los investigadores estudiaron eventos similares durante el período anterior (1950-1984) y más recientemente (1985-2019). Los resultados muestran que las olas de calor del tipo de 2020 en la península antártica ahora son al menos 0,4 °C más cálidas que en el período anterior, lo que representa un aumento del 25 % en intensidad.
Además, se ha observado que la probabilidad de una anomalía regional de seis días superior a 2°C se ha multiplicado por diez desde 1950–1984. Los cambios en la circulación atmosférica ocurridos recientemente en la región no pueden explicar el aumento de la temperatura durante este evento, por lo que, en la conclusión del estudio, se atribuye la responsabilidad a los siguientes factores: antropogénico, es decir, al cambio climático global provocado por los seres humanos.
Finalmente, el estudio se titula «Climate warming amplified the 2020 record-breaking heatwave in the Antarctic Peninsula». Y se ha publicado en la revista académica Communications Earth & Environment, que pertenece al grupo Nature. (fuente: NCYT)