IDL, pretende criminalizar a la prensa independiente

El reciente acoso fiscal y la persecución política contra los periodistas de "Contracorriente" de Willax Televisión, liderados por Carlos Paredes y Augusto Thorndike, representa un grave atentado contra la libertad de prensa. El Instituto de Defensa Legal (IDL) ha presentado una denuncia infundada contra el equipo por un reportaje que reveló información bancaria de interés público, obtenida de manera legítima.

Por: Alejandro Marco Aurelio Capcha Hidalgo.
Periodista: Reg.-N°-4654-


Es impostergable e imperioso expresar nuestra plena adhesión y respaldo al acusar el atentado contra la libertad de prensa ante la persecución política y el acoso fiscal contra los periodistas de Contracorriente de Willax Televisión, encabezados por su director Carlos Paredes y el conductor Augusto Thorndike.


El equipo del programa dominical, Contracorriente ha sido denunciado refutablemente y absurdamente por el Instituto de Defensa Legal, IDL, debido a que el programa emitió un reportaje sobre su información bancaria, lo cual es considerado absurdamente como violación del secreto de las comunicaciones.


Sin embargo, la incriminación es frágil porque al programa televisivo dominical le llegó, en sobre cerrado, el reporte de siete cuentas bancarias que IDL tiene en bancos locales, y que es el dinero que recibe de la fundación Open Society y otras. Los profesionales periodistas consideraron que, previo análisis minucioso y verificación de que se trataba de dos cuentas en soles, dos en dólares y una en euros, debían publicar un informe porque era material de interés público al tratarse de que el Instituto de Defensa Legal que, es un Organismo No Gubernamental, ONG controversial que conmociona en la vida política, en el sistema de administración de justicia, en la vida social y en las comunidades nativas. Además, porque ese dinero llega sin control del Estado.


La sensatez editorial fue justo y apropiado puesto que existen antecedentes en la jurisprudencia local e interamericana que establecen que cuando un periodista recibe, de manera anónima, una información que considera de alto interés público, y verifica que es verdadera, no comete ningún delito al publicarla.


Pero la persecución fiscal no termina allí. Contra Paredes hay varias denuncias penales, cuatro de IDL y una del Equipo de Fiscales contra la Corrupción. Por esa razón, como ha declarado reiteradamente, no le extraña que los fiscales Rafael Vela y Domingo Pérez busquen perjudicarlo, más aún cuando se hizo público el interrogatorio al colaborador eficaz Jaime Villanueva, “amigo de los fiscales, Vela y Pérez” caso específico, Patricia Benavides.


Carlos Paredes, periodista de trayectoria intachable en investigación y a quien estimamos, valoramos por su trayectoria deontológica, formuló que “a estos fiscales les encanta la pantalla, el poder, les encanta el dinero. Vela y algunos otros fiscales de Eficcop convierten a los periodistas, que les filtran información, en rehenes de sus causas inconfesables”. Y ha añadido: “Marita Barreto cree que es intocable”. Ahora, esta señora lo que está haciendo es mandar a sus subordinados para criminalizar el periodismo de investigación”.


 Es el momento, oportuno que debemos hacer frente común desde la prensa independiente y realizar espíritu de cuerpo. Estoy seguro que la Federación de periodistas, y el Colegio de periodistas actuarán impidiendo que el derecho a investigar, publicar, informar y opinar sea violentado, coaccionado y se criminalice, recurriendo a leguleyadas que rechazan bruscamente a la Constitución Política del Perú, desconociendo el Título I, y el Capítulo I, Artículo 2°, inciso 4. A los señores representantes de la ONG, del Instituto de Defensa Legal, IDL no actúen impunemente en nuestro país aún existe el Estado de Derecho, y lo haremos respetar como se merecen los ciudadanos peruanos.