El presidente de los Estados Unidos anunció que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y el príncipe heredero de Abu Dhabi, Mohamed bin Zayed Al Nahyan, lograron un histórico acuerdo de paz y normalización total de las relaciones entre ambos países, siendo Estados Unidos mediador del mismo. “Es un momento histórico, la paz aleja la guerra, es la paz a cambio de la paz” declaró Netanyahu en televisión, en la que ha recordado los acuerdos de paz con sus vecinos Egipto y Jordania. El primer ministro israelí anunció el intercambio de misiones diplomáticas.
Hace unos días el jefe del Mosad, Yossi Cohen, viajó a los EAU para realizar el acuerdo que se concretó este jueves en una conversación telefónica en tres bandas: Trump, Netanyahu y Bin Zayed. Trump tuiteó una extensa declaración conjunta entre EE. UU., Emiratos Árabes Unidos e Israel, y calificó el acuerdo de normalización total de las relaciones entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos como un avance diplomático histórico.
La declaración dice que la normalización de las relaciones reunirá a dos de los socios regionales más confiables y capaces de Estados Unidos y que las naciones se unirán con Estados Unidos, para lanzar una agenda estratégica para el Medio Oriente sobre cooperación diplomática, comercial y de seguridad.
“El anuncio de hoy es una victoria para la diplomacia y para la región. Es un avance significativo en las relaciones árabe-israelíes que reduce las tensiones y crea nueva energía para un cambio positivo” dijo Yousef Al Otaiba, embajador de EAU en Estados Unidos, en un comunicado.
Trump bromeó diciendo que quería que dicho acuerdo se llamara “el acuerdo Donald J. Trump”, sin embargo el nombre del acuerdo se llama “Abraham”. “¡Gran avance hoy! ¡Acuerdo de paz histórico entre nuestros dos grandes amigos, Israel y los Emiratos Árabes Unidos!”, tuiteó Trump.
A cambio de paz y la normalización de las relaciones con Emiratos Árabes Unidos, Netanyahu tuvo que declinar a una de sus más grandes promesas electorales: la anexión de hasta el 30 % de los asentamientos judíos y el Valle del Jordán en Cisjordania, ocupada por Israel desde 1967 en la guerra de los “6 Días”. Por un lado Mohamed bin Zayed calificó que “el acuerdo frena la futura anexión de territorios palestinos”. Por otro lado Netanyahu no escatima que intentará promover en un futuro el plan de anexión de asentamientos judíos en territorio palestino siempre en coordinación con EE.UU. Una afirmación destinada a bajar las tensiones en su partido político: Likud. Este acuerdo de paz se produce en medio de una gran inestabilidad política en Israel.
Cabe mencionar que el premier israelí había comunicado que el 1 de julio arrancaría el proceso de anexión sobre las comunidades en Judea y Samaria. Sin embargo la pandemia del nuevo coronavirus, la falta de acuerdo con el ministro de Defensa, Benny Gantz, su exrival político por el temor a una ruptura de relaciones con Jordania y la ausencia de la luz verde de Estados Unidos al llamado “Acuerdo del Siglo” además de la oposición de la comunidad internacional, liderada por ONU, la Unión Europea y Jordania, contribuyó a frenar las intenciones de Netanyahu.
Delegaciones de ambos países se reunirán en las próximas semanas para firmar acuerdos en materias como inversiones económicas, turismo, vuelos directos, seguridad y tecnología. Sus principales líderes tienen previsto reunirse pronto en la Casa Blanca para escenificar este acuerdo que supone también una importante ayuda para Donald Trump, a menos de 100 días de las elecciones en EE.UU.
Delegaciones de ambos países se reunirán en las próximas semanas para firmar acuerdos en materias como inversiones económicas, turismo, vuelos directos, seguridad y tecnología. Sus principales líderes tienen previsto reunirse pronto en la Casa Blanca para escenificar este acuerdo que supone también una importante ayuda para Donald Trump, a menos de 100 días de las elecciones en EEUU.
Varios líderes y embajadores mundiales saludaron el acuerdo, Joe Biden, rival político de Trump en las elecciones dijo “Ayudará a tender puentes en la brecha que divide a Medio Oriente”; mientras el líder palestino Mahmud Abás, condenó el acuerdo entre Israel y EAU. Horas después Palestina decidió retirar a su embajador de los Emiratos.
Emiratos Árabes Unidos es el tercer país árabe en firmar la paz con el Estado judío después de Egipto (1979) y Jordania (1994). Ahora Bahrein podría ser el siguiente país de la región en estrechar la mano de forma pública con Israel.
M.A.N.