Luego de la designación del nuevo gabinete ministerial, encabezado por Aníbal Torres, se han generado muchas críticas de diversos grupos políticos y gremios empresariales. Una de ellas es de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), el gremio considera que el presidente Castillo “ha demostrado una vez más que no tiene la capacidad de convocar a profesionales con experiencia y trayectoria intachables”.
Ve con malos ojos, el que se haya priorizado la cuota de poder y que los nuevos ministros, salvo algunas excepciones, sean más de lo mismo, según sus propias palabras. Para el gremio, este nuevo gabinete, es uno de supervivencia, no asegura que nuestro país salga de la pandemia y mucho menos que impulse la generación de puestos de trabajo formal o que atraiga la inversión privada.
Para la CCL, el mandatario solo ha buscado que los grupos políticos no lo lleven por el camino de la vacancia, otorgándoles carteras importantes. Pide a la Contraloría, al Poder Judicial y a la Defensoría del Pueblo mantenerse vigilantes de todo lo que suceda, e insta al Congreso que ejerza sus labores de fiscalización y control político.
“Esto con el fin de impedir que el país continúe siendo manejado como un botín en el que se reparten ministerios, puestos de trabajo, contratos y licitaciones a amigos, familiares, socios electorales y malos empresarios coludidos con el poder”, enfatiza.
La Sociedad Nacional de Industrias (SNI) se sumó a las críticas, asegura que este gabinete no garantiza un rumbo definido para el país. Señala que, para la estabilidad del país, es necesario que exista un consenso al elegir ministros, lo que permite tender puentes con el Congreso y la sociedad civil, “el presidente ofreció un gabinete de ancha base por la gobernabilidad”, dice.
La vicepresidenta de Inversiones Inmobiliarias de Credicorp Capital Asset Management, Mavy Acevedo, expresó que hay un bajo interés de inversionistas por apostar por nuevos proyectos. Según los datos de la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (ASEI), con data a diciembre del año pasado, solo siete nuevos proyectos inmobiliarios ingresaron al mercado, cuando en marzo de 2021 la cifra alcanzaba los 32 proyectos.
Acevedo asegura que este panorama se debe a la incertidumbre política. Además, indicó que esto podría generar una menor oferta de viviendas y, por lo tanto, un alza en los precios que están estables.
“Por ahora tenemos el stock de proyectos que ya ingresaron durante 2021. Si dejan de ingresar nuevos en los próximos meses, probablemente cada seis meses habría desajustes en el mercado”, acotó.
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