El expresidente de Bolivia, Gonzalo Sánchez de Lozada, ahora enfrenta juicio oral. Después de ser demandado por autorizar la intervención militar en una sangrienta represión que terminó en la muerte de 50 personas durante el 2003, llamada la “Masacre de Octubre”. Debido a ese acontecimiento, dimitió del cargo y huyó a Estados Unidos.
Sánchez de Lozada tiene denuncias que buscan indemnizar por daños y perjuicios a los familiares de ocho de las víctimas. Además, por matanzas extrajudiciales, crímenes contra la humanidad y homicidio culposos de ciudadanos bolivianos, esto por parte de su entonces ministro de Defensa, Carlos Sánchez.
La ONG de Nueva York que representa a los familiares de las víctimas, Center for Constitutional Rights, alega que los exgobernantes usaron la fuerza militar para anular las protestas populares que tuvieron lugar en la “Guerra del gas”.
Si el delito es una violación de las leyes de la nación o de un tratado del que Estados Unidos es signatario, entonces el juicio civil se puede llevar a cabo en tribunales federales estadounidenses por un delito consumado fuera del país.
El juicio comenzó el 5 de marzo en el tribunal federal de Fort Lauderdale, en el norte de Miami y durará dos semanas.
F. H. A.