Este miércoles, un autobús con pasajeros que recorría una carretera del oeste de Afganistán explotó producto de una mina que se activó a su paso, dejando aproximadamente 35 personas muertas y 27 heridos.
La explosión tuvo lugar en la provincia de Farah a las 6 de la mañana. El autobús con pasajeros piso la mina enterrada en la carretera que une el oeste y sur del país, haciéndolo detonar al instante. Así lo afirmó el portavoz de la Policía Provincial, Muhibullah Muhib.
“Todas las victimas de este suceso son civiles, incluidas mujeres y niños” indicó el portavoz del Palacio Presidencial, quien, además, calificó el acontecimiento como una “masacre perpetrada por las minas de los talibanes”.
Se resalta que, este martes, La Misión de la ONU en Afganistán (UNAMA) reveló un informe que señala que el número de civiles muertos en la primera mitad del 2019 asciende a 1.366 fallecidos. Además, les atribuye la responsabilidad tanto a los grupos insurgentes como los Talibanes y el Estado Islámico, así como también, a las mismas fuerzas afganas e internacionales.
P. H. E.