El último lunes, se reanudó el funcionamiento del puente Bella Unión con el fin de agilizar el paso vehicular, de modo que todos los días por esas zonas se genera un tráfico terrible y los transeúntes se ven obligados a bajar de los medios de transportes públicos y caminar varias cuadras de la av. Universitaria, para así llegar más rápido a su destino, arriesgando su integridad física, ya que en diferentes ocasiones se ha recibido denuncias en la zona por robos, muchos de ellos con armas de fuego.
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A pesar que se ha entregado la obra, el cual se comenzó a ejecutar desde el año 2013, dado que el puente se había desplomado y se necesitaba con urgencia que sea removido por el bienestar de los transeúntes, al parecer no cubre las expectativas de expertos.
Para el ingeniero civil y docente de la Universidad Ricardo Palma, Jorge de la Cruz, manifestó que “la geometría del puente es forzada porque debería tener una mayor amplitud de la que se ha conseguido”, ya que es muy probable que el tráfico en la zona de la av. Universitaria siga existiendo.
A su vez, el ingeniero de transito David Fairle opinó que, a pesar de que la vía del puente Bella Unión sea tres carriles, a dos genera un cuello de botella que debe ser solucionado. Cabe señalar que en la hora llamada marcha blanca se genera un tráfico desde el Ovalo José Granda, av. Perú y Universitaria afectando a los vecinos.
V.Q.C
