El 17 de mayo del 2103 el Congreso aprobó la Ley de Alimentación Saludable (N° 30021) con el fin de reducir el nivel de obesidad que por ese año estaba fijado en 24 % en niños entre 5 y 11 años de edad.
A puertas de cumplirse cinco años de aprobada la ley, esta no se ha implementado y la obesidad en los niños se ha incrementado posicionándose en 32 % según cifras del Ministerio de Salud (Minsa).
«Es el colmo que la ley tenga cinco años sin implementarse y una vergüenza que la obesidad se haya incrementado. (La ley) no solo se limita al tema del etiquetado, es educación alimenticia para los niños, implica regular el expendio de comida chatarra en los colegios, mayor actividad física», expresó indignado el excongresista Jaime Delgado, autor de la ley en el 2013.
Para la implementación de la ley es necesario la publicación del Manual de Advertencias Publicitarias. Con su publicación las papitas fritas, galletas, gaseosas y demás productos considerados “chatarra” empezarían a lucir los octógonos.
Impuestos con educación alimentaria
Como parte de su política sanitaria, la gestión Vizcarra elevó el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a varios productos entre estos las bebidas azucaradas permitiendo S/ 1.700 millones adicionales para el fisco este año. Sin embargo para el excongresista Vizcarra la medida no es suficiente sino que esta medida debe ir acompañada de una buena educación alimentaria.
Impuestos reducen consumo
Varios países en el mundo habrían reducido los índices de consumo de alimentos chatarra según las versiones de sus protagonistas.
En Chile se busca aplicar impuestos de $ 0,003 por gramo de azúcar, $ 0,051 por gramo de sodio y $ 0,038 por gramo de grasa saturada. Esta propuesta es de autoría del senador Guido Girardi quien concluye que gravando impuestos al azúcar podrían disminuirse el 60% de nuevos casos de diabetes en un año. De igual forma, la disminución del consumo de sal con estos impuestos reduciría en 49% los casos anuales de hipertensión y en 41% los casos de accidentes cerebrovasculares.
“Los alimentos basura tienen un costo para Chile que supera los US$ 1.000 millones de dólares al año que el sistema público de salud tiene que pagar. La aplicación de estos impuestos tienen un inmenso impacto, además de recaudar US$ 450 millones por año, disminuirá nuevos casos de diabetes, infartos y otras enfermedades crónicas no transmisibles”, sostuvo el senador.
En Gran Bretaña una reciente investigación hecha en Gran Bretaña y publicada por la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, la Universidad de Cambridge y la Universidad de Oxford revela gravando impuestos sobre los dulces, chocolates, pasteles y galletas, podría haber repercusión en la salud pública.
En México en el año 2014 se gravó impuestos a las bebidas y en su primer año se desincentivó el consumo en 5,5%. En el año 2015 el desincentivo al consumo fue de 9,7% respecto al primer año de implementación. En promedio, los mexicanos consumen 5,1 litros menos de gaseosa desde que se implementó la mencionada ley.
En el caso del impuesto de 8% aplicado a la comida chatarra, éste produjo un desincentivo al consumo de 10,2% en las familias más pobres en su primer año y 5,8% menos en las familias de ingresos medios.
Este martes el Congreso peruano discutirá la observación del presidente Vizcarra a la ley que busca eliminar los octógonos.
C.Q.R.