Esta tarde España se tiñó de rojo. Trece muertos y ochenta heridos dejó un atropello en Barcelona, en el lugar turístico “La Rambla”. El Estado Islámico se atribuye el atentado.
Según las autoridades españolas, uno de los autores del incidente fue identificado como Diss Oukabir y su cómplice aún continúa con paradero desconocido. Testigos afirman que el vehículo intentaba arrollar todo lo que encontraba a su paso.
«(El terrorista) Iba haciendo eses, atropellando a todo lo que podía», señaló el taxista Óscar Cano, testigo de lo ocurrido, en declaraciones a TV3.
Póstumo a la masacre vehicular, se oyó el rumor de que Oukabir se había perpetuado en un bar de la zona con una escopeta en mano, pero luego el dato fue desmentido por los efectivos de la policía.
«Cuando pasó todo, salí corriendo y vi destrozos, cuatro cuerpos en el suelo, gente atendiéndolos, gente llorando y también había muchos extranjeros que habían perdido a sus familiares», dijo a la agencia AFP, Xavi Pérez, de 26 años y dependiente de una tienda del lugar.
R.R.D.