La próxima 75ª Asamblea Mundial de la Salud (AMS), se realizará entre el 22 al 28 de mayo próximo, con el objetivo de instar a la Organización Mundial de la Salud (OMS), que dirige, Tedros Adhanom Ghebreyesus, para que reconozca la indispensable y apremiante participación de la República de China (Taiwán) en calidad de observador en la AMS del presente año y su participación regular en todas las reuniones, actividades y mecanismos de la OMS.
El mundo sigue sin poder contener la propagación del virus Covid-19, lo que pone de relieve la importancia y la necesidad de la cooperación internacional para enfrentar los desafíos de esta pandemia que hasta el momento no ha dado tregua. Taiwán siendo el primero en comunicar sobre la propagación del Covid-19 recibió el reconocimiento del Panel Independiente de Preparación y Respuesta ante Pandemias (IPPR, siglas en inglés) de la AMS al respecto, desde el brote de la epidemia ha mantenido un alto grado de alerta y contenido exitosamente la propagación dentro de su territorio con sus medidas rápidas y eficaces, pese a su proximidad al origen del virus.
Ante la constante propagación de la pandemia, Taiwán ha compartido su experiencia en la prevención epidémica y proporcionando, mediante diferentes canales, insumos médicos a más de 80 países que los necesitaban urgentemente. Lo cual, no sólo manifiesta plenamente el espíritu humanitario ante tales adversidades y padecimientos, sino también demuestra que “Taiwán puede ayudar y Taiwán está ayudando”, habiendo recibido el reconocimiento global por su contribución. Taiwán sigue mostrando su indesmayable participación en lucha contra el Covid-19 mediante su fuerte capacidad de investigación, alto nivel de desarrollo de la atención médica y la nueva tecnología de elaboración de vacunas.
Estamos conformes, señor Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, con su llamamiento de que todos los países han de aprender los unos de los otros de sus experiencias exitosas, tomar acciones concertadas y proteger la humanidad. Taiwán se ha entregado de lleno para contribuir al mundo, lastimosamente la prevalencia de consideraciones políticas sobre los profesionales, sigue dejando a Taiwán excluido de la red de prevención de enfermedades infecciosas y de seguridad sanitaria.
El Taiwán que conocemos es un país que aboga firmemente por los valores de la libertad, la democracia, el pluralismo y la inclusión, además de ser una nación del bien capaz de retribuir a la sociedad internacional. No deseamos ver que las desavenencias políticas internacionales pongan en riesgo la salud de los ciudadanos de un país bondadoso y diligente. Ello supone no solo una pérdida para Taiwán, sino también una gran pérdida para los 7.700 millones de seres humanos del mundo, incluyendo a Ud., a su organización y al Perú.
En este sentido, mediante la presente exhortamos solemne y sinceramente lo siguiente: el virus no entiende de política ni la propagación de fronteras; reconocer que Taiwán es una importante fuerza en la prevención epidémica, los derechos de salud de sus ciudadanos, así como el espíritu estipulado en la Constitución de la OMS que “la salud es un derecho fundamental de todo ser humano y un valor universal, sin distinción de raza, religión, ideología política o condición económica o social”. Todo lo anterior, apoyamos la inclusión de Taiwán en carácter de observador en la Asamblea Mundial de la Salud del presenta año y su participación regular en todas las reuniones, actividades y mecanismos en la OMS, permitiendo que Taiwán contribuya de manera conjunta a la salud de la humanidad, y que los derechos de salud de los taiwaneses sean salvaguardados.
