Emoliente, la bebida que calienta en invierno y mejora tu sistema inmune

El tradicional emoliente peruano aporta beneficios al organismo humano menciona la nutricionista Saby Mauricio.

La nutricionista Saby Mauricio compartió con la Agencia Andina que el consumo de emoliente provoca una acción positiva en la sangre, el sistema digestivo y el sistema inmune gracias a que esta bebida posee una gran variedad de ingredientes como la cebada, linaza, cola de caballo, hierba luisa, manzanilla, cedrón, piña, membrillo, manzana delicia y limón.

Sin embargo, advirtió que consumirlo con azúcar “debería de ser mínimo”. Es por ello que recomienda que durante su preparación se utilicen cáscara de piña y limón para dar un sabor más dulce y así evitar el consumo de azúcar.

Si se consumiera el emoliente sin azúcar este podría remplazar al agua como fuente de hidratación, de esta manera se tendría que tomar entre uno y dos litros diarios señalo la exdecana del Colegio de Nutricionistas. Por ello conoceremos por qué es una bebida tan saludable.

Reduce el colesterol, La linaza es la fibra que ayuda a reducir el colesterol. Cuando se empieza a hervir, el emoliente gana una viscosidad causada por la fibra soluble, lo cual reduce los altos niveles de colesterol. Además, tiene efecto hipoglucemiante, es decir, que reduce el azúcar en la sangre, lo cual es beneficioso para personas con diabetes tipo II y para pacientes con colesterol elevado. “Si mejoras la diabetes y el colesterol, por consiguiente, mejora la salud cardiovascular”, mencionó la experta.  

Ayuda a bajar de peso, siempre que reemplace la azúcar por la cascara de piña. “El mucílago (sustancia viscosa) forma una barrera entre los alimentos y las enzimas digestivas que están a nivel del estómago y les impide la formación de otros productos de degradación. Esto le da efecto de saciedad, es decir que te sientes lleno más rápido”.

Fortalece el sistema inmune, Mauricio destacó que esta bebida ayuda a reforzar el sistema inmune suficientemente fuerte para enfrentar diversas enfermedades como el COVID 19. “El mucilago de la linaza ejerce un efecto positivo en la microbiota o microflora intestinal, nutrientes que fortalecen el sistema inmune y forman la mucosa intestinal, haciendo que se integren como nuevos aliados para ayudar a que el sistema inmune funcione mejor. Con un sistema inmune fortalecido, se puede prevenir enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes, la hipertensión arterial, entre otras”.

Antioxidante, la cola de caballo, así como otras hierbas presentes en el emoliente, son una fuente de antioxidantes (antienvejecimiento), lo cual también favorece en la parte interna del cuerpo y contribuye a reducir el riesgo del cáncer.

Mejora molestias gastrointestinales, ayuda a mejorar las molestias gastrointestinales, como la gastritis, que es la inflamación del estómago, la cual puede darse incluso por estrés. Además, la cebada es un alimento diurético por excelencia.

Por último, su acción contra el resfriado, ya que aporta vitamina C y, por tanto, tiene un efecto positivo en la prevención de los resfríos. No obstante, Mauricio advierte que “no debemos apurarnos en consumir vitamina C durante la temporada de invierno, sino que debe estar presente siempre en la mesa del hogar”.

D.N.L.C