Embajada de Bolivia celebró Día Nacional del Acullico

La Paz y Bogotá han solicitado a la OMS un Examen Crítico de la Hoja de Coca en su estado natural

Ricardo Sánchez Serra*

“Junto con el hermano Gobierno de Colombia, hemos solicitado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) un Examen Crítico de la Hoja de Coca en su estado natural, con el objetivo de que se redefina su situación legal en la Convención Única de 1961. Creemos firmemente que este examen (cuyo resultado se obtendrá entre junio y octubre) es una oportunidad histórica para que el mundo comprenda el verdadero valor de la coca, no desde una perspectiva restrictiva y punitiva, sino desde su potencial como recurso medicinal, nutricional y cultural”, afirmó la encargada de negocios de la Embajada de Bolivia en el Perú, Eva Gloria Chuquimia, al celebrar el Día Nacional del Acullico.

Eva Gloria Chuquimia: “Solicitamos que acompañen a Bolivia en la solicitud del Examen Crítico de la Hoja de Coca a la OMS y que apoyen una nueva visión global que permita su uso de manera justa, sostenible y respetuosa con la cosmovisión de los pueblos indígenas”

Cabe mencionar que se celebra esta efeméride con el objetivo de revalorizar la hoja de coca y su significado cultural. Esta celebración busca reconocer y preservar la tradición milenaria de masticar hojas de coca, que es una práctica común en Bolivia y en otros países. La hoja de coca es vista como un símbolo de salud, alimentación y fuerza de trabajo.

“Esta costumbre, que consiste en el masticado de la hoja de coca en su estado natural, ha sido una fuente de sustento, medicina y espiritualidad para nuestros pueblos desde tiempos inmemoriales”, sostuvo la diplomática.

“El Acullico -agregó- no solo es una práctica que se ha mantenido viva entre las comunidades bolivianas a lo largo de los siglos, sino que sido reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de Bolivia. Esta tradición es un testimonio de la resistencia, la sabiduría y el vínculo indisoluble que tenemos con nuestra tierra, así como de los beneficios medicinales que la hoja de coca nos ofrece. Sin duda, el masticado de la coca es un elemento integral de nuestra cosmovisión, y como tal, nos sentimos profundamente orgullosos de defenderlo frente a los desafíos que, aún hoy, enfrentamos en su reconocimiento global”.

Chuquimia recordó que en 2013 Bolivia logró la adhesión a la Convención Única de las Naciones Unidas sobre Estupefacientes de 1961, con una reserva que permitiera el masticado de la hoja de coca dentro de su territorio.

Los invitados tuvieron la oportunidad de masticar coca y probar infusión, galletas y panetón a base de esa planta medicinal y energizante.

“Esta es una medida que reconoce la importancia de la coca no solo como un recurso, sino como parte fundamental de nuestra cultura, patrimonio y salud. Sin embargo, la lucha no termina aquí. Los conocimientos tradicionales asociados a la hoja de coca, y la medicina que se deriva de ella, han sido objeto de malentendidos y de estigmatización a lo largo de los años, en gran parte debido a su inclusión en la Lista I de la mencionada Convención. Esta clasificación no solo desestima el valor cultural y medicinal de la coca, sino que también ha puesto en peligro los derechos de nuestros pueblos indígenas sobre sus recursos genéticos y sus saberes ancestrales”, aseveró.

En otro momento la diplomática boliviana dijo que no se podía olvidar que, en la actualidad, el sistema de propiedad intelectual a menudo no protege de manera adecuada los derechos de los pueblos indígenas sobre nuestros conocimientos tradicionales y recursos genéticos. La falta de reconocimiento de estos derechos ha permitido que se exploten, sin retribución alguna, los saberes y recursos que hemos protegido y transmitido de generación en generación.

Parte de los invitados a la conmemoración por el Día del Acullico, entre los que se encuentran diplomáticos de Emiratos Árabes Unidos, Indonesia, El Salvador y la jefa de la Cruz Roja Internacional, Linh Schroeder. (Foto Ángel López)

“Bolivia, junto a otros países de la Amazonía como Perú, poseemos una riqueza invaluable en recursos genéticos y saberes ancestrales que debemos preservar. No solo hablamos de la hoja de coca, sino también de otros productos agrícolas fundamentales como el maíz, la papa, la yuca, y una vasta variedad de plantas medicinales. La protección y valorización de estos recursos no es solo una cuestión de justicia, sino también de sostenibilidad y bienestar para nuestras comunidades”, informó la encargada de negocios boliviana.

*Premio mundial de periodismo «Visión Honesta 2023»