Hoy en día, la anemia es una enfermedad muy común por la falta de hierro en la alimentación y el bajo nivel de hemoglobina. La anemia se puede clasificar en diferentes grados: leve, moderado o severo. Los síntomas son cansancio o insuficiencia cardíaca hasta incluso puede dar infartos al miocardio.
La anemia es común en pacientes con cáncer, ya sea por el efecto secundario del tratamiento para combatir esta enfermedad o por la misma enfermedad, por lo que contribuye a tener síntomas clínicos y reduce la calidad de vida en estos pacientes. Los que cuenten con algún grado de anemia tienen efectos negativos que incluye riesgo de aumentar la toxicidad inducida por la quimioterapia o radioterapia.
Muchos aspectos en cuanto a la calidad de vida del paciente con cáncer se ven afectado. Al tener anemia el paciente con cáncer reduce la respuesta al tratamiento e incrementa la cantidad de transfusiones de sangre. Las transfecciones sanguíneas están asociadas con riesgos, inconvenientes, costos y un beneficio temporal.
Para manejar la anemia en los pacientes se debe reducir la necesidad de las transfusiones sanguíneas para mejorar la calidad de vida del paciente y tenga mayor energía. Aunque, estudios clínicos no evidencian que esto pueda mejorar del todo su calidad de vida.
A.C.R.