Escrito por Lorenzo Pérez
El árbol navideño es junto al armado del nacimiento, el intercambio de regalos y la cena navideña un elemento característico de esta festividad que une a la familia. Hoy en día es típico que se coloque un árbol como señal de celebración, pero muy pocos conocen cuál es el origen y el significado de este. Por tal motivo, en esta nota te contaremos más sobre el árbol navideño.
La tradición de dotar de significado y valor a los objetos ha acompañado a la humanidad desde tiempos inmemoriales e independientemente de su cultura. El árbol navideño es una costumbre ancestral, ajena, en sus inicios, al cristianismo, como pocos saben.
Jeremías, profeta del siglo VII a.C., catalogó a las costumbres de los pueblos como actos de vanidad, ya que a un leño lo adornaban con plata y oro. Así como él, Tertuliano, cristiano y prolífico escritor, que vivió entre los siglos II y III d.C., definió como actos paganos a los cultos romanos que acostumbraban colgar laureles en las puertas de las casas y encender luminarias durante los festivales de invierno.
Los celtas decoraban los robles con frutas y velas durante los solsticios de invierno porque para ellos esa era una forma de revitalizar al árbol y asegurar el regreso del sol y de la vegetación. Los babilonios, por su parte, acostumbraban dejar regalos debajo del mismo.
El cristianismo, al ver que no podía erradicar esas costumbres, que consideraba paganas, decidió adoptarlas y transformarlas.
La historia del árbol navideño está ligada a la celebración del nacimiento de Frey, 26 de diciembre. que era reconocido como el dios del Sol y la fertilidad. En aquella tradición se acostumbraba a adornar un árbol en los días previos a la celebración de la Navidad. Aquel árbol adorado era el Yggdrasil, que simbolizaba al árbol del Universo. En su copa se hallaba Asgard y Valhalla, que significa la morada de los dioses y el palacio de Odín, respectivamente. Mientras que en las raíces se ubicaba Helheim, que hacía referencia al reino de los muertos.
El inicio de su adaptación comienza durante el proceso de evangelización en el siglo VIII en Alemania.
San Bonifacio, conocido como El Apóstol de Alemania por sus labores de evangelización en ese país, fue quien reemplazó al roble por un pino con hojas perennes, las cuales simbolizan el amor de Dios. Además, se agregaron manzanas para representar el pecado original, y velas para representar la luz de Cristo.
A partir de ese momento, la tradición del actual árbol navideño se extendió hacia otros lugares del mundo.
La tradición navideña en la actualidad
Tradicionalmente, el árbol navideño se termina de decorar el 24 de diciembre con la estrella en la copa del árbol. Comúnmente, la colocación de la estrella la hace el más pequeño del hogar para darle un mayor significado.
La estrella simboliza la luz que guió a los Reyes Magos hacia Jesucristo, quien nacía en ese momento.
Así como las estrellas, se acostumbra a adornar el árbol con esferas alrededor. Estas simbolizan las manzanas que no crecían en los árboles en invierno, época donde se celebraba la Navidad en otros continentes.
Por su parte, las luces representan la luz de Cristo, como en su momento la representaron las velas. También se colocan diferentes adornos como varas de caramelo, que representa la abundancia que espera la familia en el futuro.
El árbol navideño más alto del Perú
El árbol navideño más alto del Perú se encuentra en la ciudad heroica de Tacna. Este árbol cuenta con una altura mayor a 33 metros. Dentro de las novedades de este árbol es que está hecho a base de material reciclado efectuado por el personal de la Gerencia de Gestión Ambiental de la Municipalidad Provincial de Tacna.
Cabe recordar que el año pasado no pudo ser instalado por las restricciones estrictas por la covid-19.
El árbol está cerca del Arco Parabólico de los Héroes del Pacífico en el Centro Cívico.
¿Cuándo poner y cuándo sacar el árbol de Navidad?
La fecha sugerida para colocar el árbol de Navidad es el 15 o 17 de diciembre para que esté presente en las dos semanas finales del Adviento.
Por otro lado, el árbol de Navidad debería quitarse el 6 de enero, fecha posterior a la Epifanía luego de la Fiesta del Bautismo del Señor. El Tiempo Litúrgico termina con esto.