La presidenta de Perú, Dina Boluarte, lamentó “profundamente” el fallecimiento del Nobel, a quien llamó “escritor universal”. El Congreso, el Poder Judicial y otras instituciones peruanas también emitieron mensajes destacando su legado inmortal.
En Colombia, los expresidentes Álvaro Uribe e Iván Duque lo calificaron como “maestro de maestros” y resaltaron su defensa de la libertad. Duque recordó incluso su amistad personal y apoyo político.
Desde Uruguay, el presidente Luis Lacalle Pou expresó su admiración por la “fidelidad a sí mismo” del escritor. María Corina Machado, desde Venezuela, lo llamó “ciudadano excepcional” y referente en la lucha por la libertad.
En España, Pedro Sánchez lo describió como “un maestro universal de la palabra”, mientras que la Casa Real y la Real Academia Española expresaron su pesar y destacaron su influencia en la lengua y cultura hispánicas.
Otras instituciones como la editorial Alfaguara y la Fundación Gabo también se sumaron a los homenajes, recordándolo como figura clave de la narrativa hispanoamericana y “guía para ver más lejos”.
La muerte de Mario Vargas Llosa no solo enlutó al mundo literario, sino que también unió a líderes políticos en reconocimiento a su aporte invaluable a la cultura, la democracia y la palabra escrita.