De acuerdo a informes autorizados mencionados por medios de comunicación locales, la mandataria se trasladó utilizando el mismo automóvil empleado por Pedro Castillo cuando se dirigía a la residencia de Sarratea. La visita fue tan sigilosa que no fue detectada por los residentes del área.
La mandataria Boluarte arribó discretamente al edificio que alberga la oficina de su abogado, Mateo Castañeda, quien ya estaba bajo detención preliminar. Mientras las fuerzas policiales y los fiscales llevaban a cabo la ampliación del allanamiento, esto fue informado por fuentes oficiales citadas el domingo último por los medios.
La llegada de la presidenta, ocurrida el sábado último pasó tan inadvertida que incluso los residentes no notaron su presencia, a pesar de que estaba acompañada por su equipo de seguridad.
Originalmente, se había planificado registrar la oficina 702 del edificio en Miraflores, donde habitualmente operaba el despacho de Castañeda. Sin embargo, al notar que el abogado también hacía uso de la oficina 703, se pidió una extensión de la orden judicial para incluir este espacio en la inspección.
Dina Boluarte llegó encubierta a la oficina de su abogado en pleno allanamiento: usó un auto asociado a Pedro Castillohttps://t.co/Q9RAVAUzHn
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Alrededor de las 9:15 a.m., se produjo un timbre en el edificio sujeto a allanamiento. Al abrir la puerta, el Capitán PNP Mogrovejo Ramos Renán se sorprendió al ver a la presidenta de la República, quien, al notar la presencia policial, se dirigió hacia el ascensor”, según se indica en el documento de extensión del registro.
En estas mismas circunstancias, la abogada que actuaba como testigo y empleada del estudio jurídico allanado, salió rápidamente antes de subir al ascensor y marcharse con la presidenta, quien estaba vestida con una chompa de lana de alpaca de color hueso.
Pajuelo comunicó a Latina que aún no está claro quién asumirá la defensa de Boluarte en la reciente investigación, ya que recibió la notificación del Ministerio Público el viernes por la noche. Cuarto Poder destacó que la agenda de la mandataria es pública y que cualquier traslado presidencial debe ser coordinado con los agentes de inteligencia, quienes tienen un plan específico para proteger a la máxima funcionaria del país, aunque Boluarte no siguió estas disposiciones.
El Equipo Especial contra la Corrupción en el Poder (Eficcop) acusa a Castañeda de ser el abogado principal de una presunta red de tráfico de influencias liderada por Nicanor Boluarte, hermano de la presidenta y también detenido.
Según la investigación, el letrado habría ofrecido beneficios indebidos a los coroneles Harvey Colchado y Walter Lozano para que terminaran las investigaciones contra el familiar de la presidenta. Mientras tanto, el Gobierno sostiene que tiene claros los grandes objetivos nacionales”, dijo. Casi simultáneamente, el Ministerio Público anunciaba el inicio de acciones legales contra la presidenta por supuesto encubrimiento al desactivar el grupo policial que apoya a los fiscales anticorrupción antes de la detención de su hermano.
