Los restos fueron hallados en La Libertad, cerca a la ciudadela de Chan Chan.
La mayoría de las victimas utilizadas para el ritual eran niños entre 8 y 12 años de edad. Según National Geographic, se trataría del sacrificio masivo de niños más grande de América que tuvo alrededor de 550 años ubicado en la costa norte de Perú.
El equipo interdisciplinario internacional es dirigido por el explorador arqueólogo peruano, Gabriel Prieto, de la Universidad Nacional de Trujillo, y John verano de Tulane University, donde están investigado exactamente cómo se dieron estos sacrificios por parte de los chimúes para cometer esta semejante atrocidad.
En año 2011 se ha podido hallar más de 42 niños y 76 llamas en excavación. Finalizado con las investigaciones en el años 2016, se ha podido ubicar a más de 140 niños y 200 llamas jóvenes remontadas a los años 1400 y el 1450. “Se trata de un sacrificio en forma ritual y es muy sistemático”, mencionó el arqueólogo Verano.
De acuerdo con los investigadores, los esqueletos de los niños y los animales muestran evidencias de cortes en el esternón, así como dislocaciones de las costillas, lo que indica que el pecho de las víctimas se abrió y se separó, quizás para facilitar la extracción del corazón.