David Pacheco Villar, jefe de la oficina defensorial de Ayacucho, indicó que las instituciones del Estado tienen serias debilidades al momento de trabajar acciones que ayuden a frenar la corrupción.
Pacheco informó que su despacho actualizó la información de las graves brechas que hay en contratación de personal especializado, mobiliario, logística, transporte y otros ámbitos del Ministerio Público, contraloría y Procuraduría Especializada en Delitos de Corrupción, lo cual limita su capacidad de respuesta frente a la corrupción.
«Por ejemplo, la Procuraduría contrata a todo su personal, salvo la responsable, mediante locación de servicios; los órganos de control institucional no cuentan con personal suficiente y las fiscalías carecen de peritos especializados. Esta situación debe revertirse cuanto antes», acotó Pacheco.
Por último, la Defensoría del Pueblo recuerda a todos los funcionarios públicos, que el cumplimiento de sus deberes debe ceñirse siempre al marco normativo vigente y al Código de Ética de la Función Pública para garantizar la buena administración y así evitar incurrir en actos de corrupción o negligencia durante las funciones.