Cuarentena Inteligente

Una solución hasta la creación de una vacuna.

Crédito: Reuters

Por: Paul Saavedra

Las cifras mundiales del nuevo coronavirus superaron los 3 millones de casos positivos y sin una vacuna hasta el próximo año, se desconoce el impacto que tendrá la pandemia del covid-19 en el mundo. 

Por eso, es importante saber cuándo levantar o no las medidas de aislamiento social priorizando la salud y el bienestar de las personas, por sobre el impacto económico. Es así que, sacrificando ciertas libertades, podemos observar que en algunos países se tuvo éxito para frenar y reducir la curva de contagios aplicando diferentes estrategias. Es lo que se conoce como smart quarantine o cuarentena inteligente.

Corea del Sur

El tigre asiático registra más de diez mil contagiados y menos de 250 fallecidos, logrando frenar el contagio en su territorio. Aquello fue posible mediante algunas medidas como la creación de una base de datos de una «ciudad inteligente» alimentada por la Agencia Nacional de Policía, la Asociación de Finanzas de Crédito de Corea, tres compañías de telecomunicaciones y 22 compañías de tarjetas de crédito.

Por consiguiente, el gobierno desarrolló una aplicación, de descarga gratuita, para que los ciudadanos puedan saber dónde se ubican exactamente las personas contagiadas y, de esa manera, eviten concurrir a esas zonas. Según Reuters, esta aplicación también permite a los usuarios, que hayan estado en contacto con el virus, conectarse con trabajadores sociales para monitorear su estado de salud.

Así como también, sirve para que las autoridades tengan datos en tiempo real sobre los pacientes, incluyendo su paradero, el tiempo que pasan en lugares específicos, las transacciones con tarjetas de crédito, etc.

No obstante, algunas organizaciones criticaron al gobierno surcoreano por la vulnerabilidad de los datos privados de los ciudadanos. El gobierno informó que esta medida permite solo a un grupo reducido de personas, incluidos los investigadores, acceder a esa base de datos, la cual permite detectar los casos positivos en aproximadamente diez minutos, en lugar de un día.

Por otra parte, Corea del Sur desarrolló brazaletes para los infractores de la cuarentena, quienes ya tenía una pena hasta por un año de cárcel y multas hasta 10 millones de wones (unos 8.250 dólares), con el fin de ser alertados si una persona trata de quitársela o abandonar su espacio de confinamiento.

Chequia

Chequia, o también llamada República Checa, registra a la fecha más de 7000 contagiados y una extensión del estado de emergencia hasta el 25 de mayo; sin embargo, el 7 de abril se tuvo un punto de inflexión en la cuarentena establecida desde mediados de marzo, pues se reestableció la libertad de circulación imitando ciertas medidas adoptadas por Taiwán. Así, los ciudadanos checos podían tener reuniones de dos personas, hacer deporte o realizar visitas a familiares.

Esta cuarentena inteligente aplicada en Chequia demuestra que algunas medidas son más eficientes que otras y es posible levantar paulatinamente el aislamiento social mediante el rastreo de los casos positivos. Por lo tanto, los checos que hayan dado positivo para la prueba aceptan voluntariamente que se rastreen sus últimos movimientos a través de sus tarjetas de crédito y la geolocalización de sus teléfonos móviles con la finalidad de aislar a las personas con las que tuvo contacto.

Por otra parte, el gobierno checo promovió entre en sus internautas la opción de imprimir sus propios modelos de respiradores en impresoras 3D domésticas con materiales disponibles en el mercado. Esto se realizó para asegurar de que sus ciudadanos puedan acceder a este bien en caso hubiese habido escasez de oferta en el mercado.

Asimismo, otra medida fue la oportuna información brindada a la población mediante mensajes de textos, medios de comunicación y la página web del gobierno del avance del virus en el país con estadística del número de personas contagiadas y de fallecidas clasificadas por región, edad, sexo, etc. Además, la página cuenta con un inventario de mascarillas, respiradores y otros suministros médicos.

Posteriormente, Chequia pasó al siguiente nivel de esta cuarentena inteligente el pasado 24 de marzo, debido a que se permitió la circulación de hasta diez personas y los viajes al extranjero de los ciudadanos checos. Sin embargo, previo retorno al país, deberán someterse a una prueba para descartar covid-19 y, de ser positivos, permanecer en cuarentena 15 días.

Finalmente, es cierto que estas medidas nos plantean un escenario orwelliano donde se abre un debate de los límites del Estado sobre la privacidad de sus ciudadanos, pero en medio de esta crisis mundial, se necesitan medidas más eficaces que logren frenar el contagio de un enemigo invisible.