La entidad realizó este pedido tras el reciente infirme de gestión “Control en la pandemia por el COVID 19”, que refleja presuntas deficiencias en la gestión pública frente a los efectos del COVID 19.
“El oxígeno medicinal es primordial para la atención de pacientes diagnosticados con COVID-19 que atraviesan problemas respiratorios. Por ello, es importante atender con prioridad la alta demanda de este elemento que puede salvar la vida de más peruanos y que lamentablemente escasea en algunos centros de salud”, señaló la Contraloría.
Respecto a la vacunación, la entidad afirmó que los resultados evidenciaron que existen problemas en dicho proceso. Por ejemplo, la inadecuada programación de jornadas de inmunización ha generado saldo de vacunas al final de cada día, así como la falta de protocolos para el uso de estos saldos, sustracción y pérdidas de dosis, entre otros.
“Este proceso de vacunación, que representa la solución más eficaz a nivel mundial y el esfuerzo más importante de cada gobierno para prevenir el contagio de la COVID-19, es también una prioridad en la decisión de los gestores públicos”, se observa en el informe de la Contraloría.
En ese sentido, la institución considera prioritario que se concrete la recepción de la dosis de vacunas adquiridas por el Estado y con ellas, aumentar la velocidad en la vacunación, con la finalidad de cumplir la meta establecida por el Gobierno de inmunizar a todos los mayores de 18 años hasta el 31 de diciembre de este año.
Deficiencias alertadas
Es importante señalar que las deficiencias detalladas en el documento es el resultado de los más de 12 mil informes elaborados, notificados y publicados durante el primer año de la pandemia y que requieren una atención prioritaria por parte de las autoridades actuales y futuras.
“A pesar de los esfuerzos desplegados, y los más de S/ 133 millones asignados para enfrentar la pandemia del COVID-19, el aparato estatal demostró serias debilidades institucionales y deficiencias que no han permitido que se tomen decisiones oportunas para la contención del virus, las mismas que serán un foco prioritario para la labor de control durante el 2021”, aseguró el contralor general, Nelson Shack.
Reporte de contagios
Otra situación preocupante que dio a conocer la Contraloría es la falta de transparencia y consistencia en el reporte de contagios y fallecidos a causa de esta enfermedad. La entidad sostiene que las cifras reportadas por las Direcciones Regionales de Salud superan largamente a lo registrado y publicado por el Ministro de Salud (Minsa).
Igualmente, el informe revela que el numero de fallecidos reportado por el Minsa, al 15 de marzo, estaría subestimado en 138% comparado al reportado por el Sistema Informático Nacional de Defunciones. Mientras que, para finales de abril, el porcentaje asciende a 176%.
D.N.L.C
