John Magufuli, presidente de Tanzania, en vez de optar por el confinamiento para poder contener la propagación del COVID-19, instó a sus ciudadanos a continuar con normalidad las actividades económicas y a rezar a Dios, promoviendo la visita a iglesias y mezquitas.
Si bien el sistema escolar tanzano está clausurado, los mercados y estaciones de autobús siguen operativos y abarrotados de gente. A pesar del temor de la gente, el presidente minimizó la presencia del virus diciendo que desaparecerá rápidamente como lo han hecho otros
Un líder de la oposición, Zitto Kabwe, del partido Alianza para el Cambio y la Transparencia (ATC), hizo conocer su descontento ante la forma en que el actual gobierno está llevando la pandemia, a pesar de que en la última semana los casos de personas infectadas por el COVID-19 aumentaron de 32 a 254, y se registraran 10 muertos.
Por su parte Magufili afirmó que la pandemia ya esta golpeando fuertemente la economía de Tanzania debido a que ya no recibe ingresos del sector turístico, y que es necesario que todos sigan trabajando duro para sacar adelante al país y no destruir su economía.
C.T.M.
