Nos faltan 3 y los echaremos de menos. Que nadie en el mundo olvide a Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra, hombres de coraje que fueron cruelmente asesinados por disidentes de las Farc, luego del siniestro secuestro el 26 de marzo pasado.
Ortega fue periodista (36), Rivas un fotógrafo (45) y Segarra un conductor (60). Ellos conformaban el equipo de prensa del diario El Comercio de Ecuador y tenían que hacer un reportaje como en su habitual labor, pero esta vez en San Lorenzo, provincia de Esmeraldas Ecuador.
Todo parecía ser un día común, sin saber que era el último día que cumplirían con la tan arriesgada labor de ser periodista, en un mundo colmado de ira y violencia. No es fácil y nunca lo fue informar donde otros prefieren no informar, empotrarse sabiendo que no hay posibilidades de salir vivo y donde quizá el último beso de despedida a tus familiares sea el definitivo adiós para siempre.
Ecuador amaneció de luto, como una vez lo hizo Perú el 26 de enero de 1983, al enterarse del asesinato de 8 valientes hombres por un grupo de campesinos en Uchuraccay. Eduardo de la Piniella, Jorge Sedano, Amador García, Luis Mendívil, Félix Gavilano, Pedro Sánchez, Octavio Infante, Willy Retto, su guía, Juan Argumedo y el comunero uchuraccaíno, Severino Huáscar Morales, quien trató de defender a los periodistas, emprendieron su camino hacia la tan descarada muerte que lleva en su andar hasta al ser humano más inofensivo.
En Ecuador, días antes de la defunción, se obligó el envío de una prueba de vida que certificara la existencia de los 3 hombres. En aquella foto presenciamos la escena más nauseabunda que un ser humano pudo haber hecho. Aparecían ellos (los 3 que nos faltarán) encadenados, con gigantes ojeras y un escalofriante terror en sus miradas por lo que estaban viviendo.
El trabajo del periodista está muy infravalorado. Si solo dependiera de nosotros hace mucho no existiría la corrupción, la violencia y la inestabilidad de los pueblos. No es un asunto que solo los redactores, reporteros, columnistas, corresponsales, camarógrafos, fotógrafos e informantes debamos solucionar, seamos realistas con nuestro propio entorno.
Mediante el diario digital argentino Infobae, se dio a conocer un nuevo comunicado de los detractores de las Farc, donde se exige el retiro de los militares colombianos y ecuatorianos de la frontera para hacer la entrega de los cuerpos. El documento concluye con las siguientes frases: “Nuestra nacionalidad es donde nacimos”, “Nuestra patria es América”, “¡Fuera gringos!”
Se dejan familias solitarias tras la muerte de estas grandes personas, parientes que recordarán con eterno desconsuelo a Rivas, Ortega y Segarra como el ejemplo más aterrador de un “regreso pronto” sin retorno.
El día en que observemos la portada de un periódico sin una muerte, violación, pago o soborno, será el día en que suspiremos con tantas ansias y digamos que a pesar de todo sí se pudo. Paz para el mundo, tranquilidad para las personas. No más muertes ni violencia.
Shleyter De la Cruz Merino
Joven de la Federación de Periodistas del Perú