Las tres mociones de destitución contra la Presidenta de la República no consiguieron el respaldo suficiente para ser consideradas. Se requería el apoyo de al menos el 40% de los legisladores activos, lo que equivale a 47 votos de los 117 congresistas.
En la sesión del Congreso del 17 de mayo, se llevó a cabo un debate sobre la admisión de tres mociones de vacancia presentadas contra Dina Boluarte. Estas mociones se basaban en acusaciones de una presunta «incapacidad moral permanente». Sin embargo, la participación en la sesión plenaria fue baja y los legisladores rechazaron las tres solicitudes, que fueron sometidas a votación individualmente.
En el caso de la primera moción, fue rechazada con 45 votos en contra y solo 32 a favor. La segunda no fue admitida con 44 votos en contra, y la tercera recibió 47 votos en contra y solo 32 a favor. Se destacó que muchos de los parlamentarios que habían suscrito las mociones no estuvieron presentes en la sesión, generando críticas al proceso. Además, se mencionó que aproximadamente un mes antes, (el 4 de abril), el Congreso también había desestimado otras dos mociones de vacancia relacionadas con el caso Rolex y una investigación fiscal por presunto enriquecimiento ilícito. La primera moción obtuvo 33 votos a favor y la segunda 32, sin llegar a los 48 votos requeridos para su admisión.