Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Síndrome de Down es unos de los problemas genéticos más común en la sociedad, dado que ocurre en uno de cada 800 nacimientos. El principal factor de este riesgo es la edad, ya que se registran casos de mujeres embarazadas que superan los 35 años creando complicaciones durante la gestación o el parto.
Existen maneras de poder detectarlo durante el embarazo, según define Héctor Rivera Reyes, especialista en pediatría de ARIE (Instituto para el desarrollo infantil), “las ecografías pueden dar una orientación a los padres, con ellas se pueden observar ciertas características anatómicas relacionadas con el síndrome. Por ejemplo, el engrosamiento o pliegue en la zona de la nunca”.
Después de revelar el riesgo, el procedimiento para confirmarlo es por medio de una punción dirigida por ecografía, lo que permitirá retirar líquido amniótico, donde las células extraídas sean estudiadas y analizadas para comprobar si él bebe tiene Síndrome de Down.
E.D.E.