Mientras el coronavirus que causa el COVID-19 se ganó la mayor atención de la población desde hace casi tres años, la infección por el virus del dengue también estuvo afectando en la región de las Américas. En 2019 se registró el mayor brote en la región desde 1980.
En 2020 hubo más de 2 millones de casos de dengue. Bajó la incidencia el año pasado pero este año volvió a crecer con 2,4 millones de casos reportados por la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
El coronavirus y el virus del dengue han estado circulando simultáneamente en la región e investigadores de Perú y Colombia se ocuparon de hacer una revisión de 19 estudios que reportaron casos de pacientes con coinfección. Se registraron 16 casos en la Argentina, 78 casos en Brasil, 51 casos en Perú, 1 caso en Ecuador, 5 en Colombia y 1 México.
Encontraron que las comorbilidades que tenían esos pacientes eran hipertensión, obesidad y diabetes. Muchos de los coinfectados necesitaron hospitalización.
Tras analizar los resultados en la revista especializada New Microbes and New Infections los investigadores de la Universidad Científica del Sur, en Lima, Perú, y la Fundacion Universitaria Autónoma de las Américas en Colombia, entre otras instituciones, identificaron algunas particularidades sobre cómo fue la situación del dengue en el contexto de la pandemia.
El coronavirus y el virus del dengue tienen diferentes puntos de entrada al organismo humano. El primero puede ingresar al inhalar el aire contaminado. En cambio,el virus del dengue se transmite por picaduras de mosquitos. Pero ambos causan una infección sistémica y comparten varios signos clínicos, como fiebre, dolor de cabeza, mialgia y problemas gastrointestinales.